El acercamiento entre Adara Molinero y Gianmarco en la casa de 'GH VIP 7' es cada vez más evidente. Hay una clara química entre ellos y es que las caricias, abrazos y besos son cada vez más frecuentes entre ambos. Esta situación cobra incluso más importancia en el momento en que la chica ha confesado que fuera de la casa todo no iba tan bien como pensábamos con su pareja Hugo Martín. Esta le confesó al Maestro Joao que uno de los problemas que ambos vivieron es que en las últimas semanas este no quería hacer el amor con ella e incluso habían tenido discusiones que le han dudado de absolutamente todo: "Él me decía: 'vete a la mierda'". ¿Ha encendido el italiano esa llama que Adara creía totalmente apagada?
Adara y Gianmarco en 'GH VIP 7'
Pues a juzgar por las imágenes... sí. Y es que durante la emisión de 'GH VIP 7: Límite 48 horas' los espectadores pudieron ver unas imágenes que dejan muy poco a la imaginación. Como es habitual, ambos se encontraban juntos dentro de la casa, tapados bajo las sábanas, pero lo que no habíamos visto hasta ahora era un claro juego entre ambos que podría haber llegado a más. Los dos empezaron a mirarse de forma intensa, a acariciarse y a evidenciar que estaban muy cómodos el uno con el otro. Empezó entonces un juego que muchos espectadores han interpretado como sexual.
Y es que los dos no dejaron de realizar unos movimientos más que sospechosos, que muchos interpretaron como el primer "edredoning" de esta posible pareja. ¿Se estaban masturbando mútuamente? ¿Había algún tipo de tocamiento bajo las sábanas? Por ahora nada queda claro con las imágenes emitidas en Telecinco, pero lo que sí pudimos ver es cómo Adara le decía a Gianmarco que estaba complemente loco. "Tú más", le respondía entonces él, mirándole con una sonrisa insinuante y metiendo de nuevo la mano bajo las sábanas. Ella no dudaba entonces en taparse, reír y volver a mirar al italiano mientras también le acariciaba. La química se volvía a hacer más que evidente en esa habitación.
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Cambiando las sábanas
Se desencadenaba un juego que seguía minutos después, cuando ya todos dormían y las luces de su cuarto se apagaban. Las caricias y besos seguían aunque en ningún momento veíamos nada claro. Pero lo que a muchos sorprendió es que lo que pasó al día siguiente, cuando Gianmarco le contó al Maestro Joao que tenía que cambiar sus sábanas. Lo hizo mientras agitaba un bote y miraba riéndose a Adara, quién no dudaba en dejar en el aire que eso era una "indirecta directa". No son pocos los espectadores que ha interpretado esto como la confirmación que sí, pasó algo bajo las sábanas.