'Prodigios' nace como un talent show destinado a mostrar a los espectadores la música clásica a través de tres disciplinas artísticas: el canto lírico, la danza y los instrumentos. Tres corrientes que se estudian en conservatorios y que tendrán su expresión mediante jóvenes de entre 7 y 16 años de diferentes partes de España. De todos ellos, solo uno de podrá alzarse con el título de Prodigio España y obtener el premio de 20 mil euros en metálico y la beca de alta especialización en la Universidad Alfonso X el Sabio.
Boris Izaguirre y Paula Prendes junto al jurado de 'Prodigios'
Este proyecto, que cuenta con la producción de Televisión Española y Shine Iberia, se encuentra capitaneado por Boris Izaguirre y Paula Prendes, quienes ejercerán funciones de presentadores muy distintas, pues el venezolano se encargará de estar sobre el escenario mientras que la asturiana buscará en la parte más "de estar por casa" de los niños y sus familias. "Yo estoy en el backstage con los niños y con sus familiares, conectado en todo momento con Boris, entonces estoy antes y después de las actuaciones. Soy un poco la amiga de los niños", afirma Prendes. Precisamente, su función es una novedad con respecto al formato francés original del que proviene y que cuenta con siete exitosas temporadas a sus espaldas.
Un jurado formado por lo mejor de cada casa
Izaguirre y Prendes no están solos frente al programa. Para valorar las actuaciones cuentan con un jurado formado por tres especialistas en cada una de las disciplinas y que, al igual que los participantes, fueron niños prodigio que empezaron con su carrera desde bien pequeños. Ainhoa Arteta se encarga del canto lírico, Nacho Duato de la danza y Andrés Salado de los instrumentos. Ellos serán los encargados de tener que seleccionar qué niños y niñas pasan a la siguiente fase.
Auditorio Miguel Delibes de Valladolid, escenario de 'Prodigios'
En suma, les otorgarán consejos a los concursantes en función de sus interpretaciones, aunque, como afirmó Salado, nunca será del mismo modo que a los adultos. "Les vamos a lanzar mensajes que les sean útiles, pero no puedes tratar a un niño de esa edad que se está abriendo a ti y que tiene una fragilidad interior emocional importante como le tratas a uno de 30 años", argumentaba Arteta. Duato también se sumaba a estas valoraciones y apostaba por que "los niños aceptan las críticas súper bien" gracias a "esta disciplina que nos inculcan desde que empezamos".
Sin embargo, el momento más dramático se vivirá cuando tengan que decidir qué concursantes no continúan su camino en 'Prodigios'. Boris Izaguirre indaga en este punto y aclara que han tenido que prepararse para aprender a transmitir las malas noticias. "El momento en el que les tienes que decir que se tienen que marchar a casa lo hemos ensayado, un poco como preparación de una estrategia de guerra, explicarle a una persona que ha perdido".
La música clásica llega al prime time
"Así lo conseguimos vender, que era parte de su deber, que una televisión pública tiene que atender este tipo de música, que no solo existe el pop y el rock", comentaba tajante Macarena Rey, CEO de Shine Iberia, en el encuentro con el equipo de 'Prodigios' que tuvo lugar en el auditorio Miguel Delibes de Valladolid. Hasta el momento, Televisión Española no apostaba por programas de corte clásico en su prime time, por lo que esto supone una auténtica apertura a un formato necesario en la cadena, hecho con el que Paula Prendes se muestra muy de acuerdo: "Es necesario que la televisión pública haga un talent como este".
No obstante, la productora ha creído conveniente aportar elementos de entretenimiento a la adaptación española, de modo que encaje con mayor facilidad entre el público. "Le hemos intentado meter un puntito más de entretenimiento porque el consumo habitual nuestro en prime time no es con programas de este estilo", explicaba Ana Rivas, productora ejecutiva, quien mencionaba que por ello se ha apostado por mostrar el backstage, realizar interludios con la orquesta y traer a invitados de la talla de Raphael y Luz Casal.
Nacho Duato, Ainhoa Arteta y Andrés Salado, jurado de 'Prodigios'
¿Pero tiene cabida entre los espectadores un programa de estas características? Rey se encuentra favorable, ya que asegura que "es un problema de que no se lo estamos dando al público". "El público es hábil y le gusta escuchar un aria bien cantada, una sonata en el piano y ver un bailarín haciendo una canción", asegura Nacho Duato. Pero, sobre todo, el factor de los niños es clave. "Despiertan en todos nosotros ternura porque vienen a corazón abierto", comenta Arteta. Por su parte, Salado se encuentra muy favorable a la llegada de 'Prodigios' y a la muestra de los artistas clásicos: "Lo acerca al público, que vean que somos personas normales y que podemos comunicar a través de nuestra energía".
"Tiene un enfoque muy valioso para todos a nivel orientativo y a nivel educativo. No solo para los niños, también para el gran público que nos escucha", afirma la cantante lírica. 'Prodigios' pretende llevar la música clásica de una forma más lúdica a todos aquellos que se encuentren tras la pantalla, apostando por el talento español que sus tres jueces aseguran que existe dentro de nuestras fronteras. "Esperamos ser suficientemente hábiles de enganchar al público y darles pequeñas dosis de aprendizaje de manera amable que les haga aprender".
Así es la mecánica de 'Prodigios'
'Prodigios' trae a lo mejor de la lírica, la orquesta y la danza a la televisión a través de la figura de los niños, quienes competirán en cinco galas para alzarse con el título de Prodigio del año. Las tres primeras galas serán una fase clasificatoria, concursando nueve artistas en cada una de ellas y divididos en grupos de tres: tres de canto, tres de danza y tres de instrumento. En un primer momento el jurado eliminará a uno de cada categoría y los dos restantes se batirán en duelo. En las tres primeras galas habrá un ganador de cada disciplina que pasará a la semifinal, por lo que, en total, esta fase -que será la cuarta gala- estará formada por los nueve semifinalistas, tres de cada categoría.
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