La productora de 'Sálvame' niega los espionajes ilegales y alude al vínculo de Gustavo González con su fuente

La Fábrica de la Tele está viviendo sus horas más complejas y más teniendo en cuenta las turbias acusaciones vertidas sobre 'Sálvame'. Con un comunicado, se ha negado tajantemente que se haya puesto en marcha cualquier tipo de espionajes ilegales, aludiendo directamente al vínculo profesional de uno de sus colaboradores con sus fuentes. La persona en cuestión sería Gustavo González, según salió a la luz durante la madrugada del sábado 26 de marzo.

La productora comienza sus alegaciones públicas asegurando que todo trabajador ha actuado "siempre en el marco de la ley y dentro de su actividad periodística". De la misma forma, aluden directamente al "legítimo ejercicio del derecho a la información", asegurando además que las informaciones publicadas son "absolutamente falsas". Por otro lado, se pide cautela ante un procedimiento judicial que se encuentra "aún en fase preliminar".

Asimismo, la empresa se desliga por completo del objeto real de las investigaciones, según el comunicado de La Fábrica de la Tele: "Lo que se investiga es la naturaleza del vínculo que mantenía un periodista [...] con una de sus fuentes, un agente de policía". Por otra parte, lo único que respecta a 'Sálvame' es el origen de determinadas informaciones que implican a una "veintena de personajes protagonistas de la crónica social".

COMUNICADO LA FÁBRICA DE LA TELE pic.twitter.com/cAiNWo2DVI

— LA FÁBRICA DE LA TELE (@fabricatele) March 26, 2022

No hay vínculo entre directores y la fuente

En los párrafos finales, la compañía participada por Mediaset España reitera que ningún director o redactor tiene relación alguna con el agente de policía investigado: "La productora es la principal interesada en contribuir al esclarecimiento de los hechos por la Justicia", aseveran. A continuación, aclaran que las autoridades no han puesto en marcha ningún proceso contra La Fábrica de la Tele.

Pese a lo que ha podido escucharse, el comunicado es firme: "Ninguno de los documentos que figuran en el procedimiento judicial proceden de ningún archivo o dispositivo de la productora, ni de ninguno de los miembros del equipo". Para concluir, se apunta hacia la rotunda falsedad de todas las informaciones que apunten "en esa dirección".