Aitana Sánchez-Gijón ha sido una de las encargadas en inaugurar la segunda temporada de 'Las tres puertas', junto al escritor, guionista y director Albert Espinosa y el cantante Manuel Carrasco. La actriz ha acudido al espacio de TVE para reflexionar sobre el mundo del cine y sus experiencias laborales y ha aprovechado su visita para desvelar el motivo por el que no quiso volver a Hollywood.
La italoespañola tuvo la fortuna de poder probar suerte en la industria del cine norteamericano en 1995 con la película "Un paseo por las nubes" junto a Keanu Reeves. Y a pesar de ser algo inesperado la intérprete se lanzó a vivir esa experiencia ansiada por tantos: "Fue algo que yo no busqué, fue algo que me sucedió". Sin embargo, lo que se encontró no se ajustaba del todo a la idea que ella tenía en la cabeza al principio.
Aitana Sánchez-Gijón y María casado en 'Las tres puertas'
María Casado le preguntó a ver cómo vivió su paso por Estados Unidos. "La experiencia fue muy buena, pero también sentía mucha soledad. Estaba en un hotel fantástico, en el rodaje me cuidaban muchísimo, pero hice venir a todas mis amigas, a mi novio de aquel momento... Sentía que ese lugar no era el mío", revelaba la invitada del espacio de Teatro Soho Televisión.
Lo más leído
Una industria llena de "fantasmas"
Además de lo sola que Sánchez-Gijón se sentía, tampoco le gustaron nada los aires que se respiraban allí. "Te recogía una limusina, te citaban los agentes y salíamos de las entrevistas con esos managers con 10 guiones. Te preguntaban '¿Tú con quien quieres trabajar? ¿Te gustaría trabajar con Harrison Ford?'. [...] Mi representante y yo salíamos de las oficinas pensando que eran unos fantasmas. Había mucho humo", reveló la actriz.