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Rocío Carrasco, en imágenes 22 fotos
El desarrollo del museo de Rocío Jurado centró todo el episodio decimotercero de 'En el nombre de Rocío', a lo largo del cual Rocío Carrasco atizó varios palos acerca del protagonismo que la familia mediática se empeñaba en ejercer en el proceso, sin tener en cuenta su papel como heredera universal. Asimismo, la madrileña respondió a las declaraciones que ellos habían lanzado señalándola como la única culpable del retraso de la apertura del museo.
"Me parece muy bien que la familia participe, pero no decide. Además, se lo dije al primer alcalde, se lo dije al segundo y se lo digo al de ahora", manifestaba la hija de Jurado, cuando el equipo de la docuserie recordaba algunos momentos en los que la familia mediática se implicó en el desarrollo del museo. "Ellos han estado siempre, con José y José Antonio, presionando a la alcaldía, presentándose en el Ayuntamiento, acudiendo a las reuniones por cojones... parece que no se han enterado que a ellos no les pertenece eso. Que ellos no son nadie para desarrollar esa función y que uno se encarga de decir que es por dinero, el otro que era la voluntad, el otro dice que yo soy muy mala porque no voy a cumplir la voluntad de mi madre...", lanzó Carrasco, sobre sus tíos Gloria y Amador Mohedano.Rocío Carrasco en la inauguración del museo de Rocío Jurado
"A mí no me tienen que contar nada, porque yo estoy en contacto directo con el Ayuntamiento. Lo que pasa es que el Ayuntamiento en ese momento hace el doble juego: les permite a ellos tener unas atribuciones que luego no les van a servir para nada, porque no van a tomar ningún tipo de decisión", relató la protagonista de la docuserie, quien insistió en que, de alguna forma, "presionaban al cabildo", lo que favorecía que "la persona al mando se ve en la obligación de tener que darles explicaciones por el hecho de ser familia". Todo ello en medio de las irregularidades que se fueron destapando en torno al museo, mientras la familia mediática conseguía, según la propia Carrasco, que, "de cara a todo el mundo, la culpable vuelvo a ser yo", al alegar que existían desacuerdos económicos entre ella y el consistorio. "Yo no he discutido de dinero con el Ayuntamiento jamás en mi vida", aseguró la primogénita de Jurado.
"Se veían todos colocados en el museo"
Carrasco tuvo ocasión de defenderse ante las declaraciones que incluso habían afirmado que ella no deseaba que la apertura del museo: "Siempre he querido que se abriera, desde el primer día que se me dijo, en las condiciones que ella se merecía". La madrileña recalcó que "yo no lo podía vincular por una presión electoral o familiar, por unos intereses económicos de la familia, unos intereses que ellos sí los tenían" y que le habían achacado a ella misma. "Ya se veían todos pululando por el museo. Se veían todos colocados y yo eso no lo iba a hacer con las condiciones que tenía el museo. No lo iba a hacer porque no iba a vincular el nombre de Rocío Jurado con absolutamente nada que no estuviera dentro de la legalidad", explicó la madrileña, quien concluyó su discurso con un claro mensaje a su familia mediática. "Si lo quieren entender, que lo entiendan; y si no lo quieran entender, que no lo entiendan. Pero es lo que hay", remató Carrasco.