El cara a cara entre Rocío Flores y Terelu en plena polémica de Rocío Carrasco: "Me quedé con mala sensación"

Rocío Carrasco se había mantenido al margen y en silencio mientras que su expareja, Antonio David Flores, su hija Rocío Flores y otros miembros de su familia se lucraban hablando de su vida. La hija de Rocío Jurado dio un golpe en la mesa y decidió sacar su propio documental en Telecinco, para empezar a contar su versión. 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' está causando un impacto mayor de lo esperado y ha puesto en jaque la imagen del exconcursante de 'Supervivientes'.

Uno de los grandes apoyos en la sombra siempre fue Terelu Campos, quien confesó que el estreno de la docuserie fue "uno de los peores días de su vida". Después de haberse mantenido fiel a su amiga, guardando la información que tenía sobre ella frente a los focos, Terelu Campos se ha reencontrado inesperadamente con Rocío Flores, hija de Carrasco. La tertuliana ha contado en 'Viva la vida' cómo fue su cara a cara con ella.

La hija de María Teresa Campos se fue a tomar algo con Kike Calleja y Diego Arrabal. Fuera del local, vieron a Gloria Camila y Flores, quienes se acercaron a la colaboradora de Telecinco para saludarla con el codo y se marcharon. "Yo creo que ellas iban a tomar algo, pero al vernos se debieron cortar. Me quedé con mala sensación porque yo jamás en la vida les molestaría, vamos", aseguró Campos. Ana María Aldón le quiso quitar hierro al asunto y afirmó que ese pensamiento de la tertuliana era erróneo: "Ellas se iban, tomaron algo en el local y como se encontraron con ella, pues educadamente, se saludaron".

Nueve años sin verse

Aunque Terelu Campos no le dio mucha importancia haberse reencontrado con Rocío Flores, lo cierto es que fue Diego Arrabal el que sacó el tema en 'Viva la vida': "Creía que iba a quedar entre nosotros", afirmó Campos, sorprendida de que su compañero desvelase la información. El tertuliano vio oportuno hablar del asunto teniendo en cuenta que la hija de Rocío Carrasco y la colaboradora llevaban nueve años sin verse. Arrabal definió el reencuentro como "cordial".