Ha costado, pero el acuerdo de desarrollo de Ryan Murphy con Netflix ya está dando sus primeros frutos realmente maduros. Pese al incesante esfuerzo de la productora del creativo estadounidense, títulos como 'Ratched', 'The Politician', 'Hollywood' o 'Halston' no lograron el impacto deseado, ya que ninguna de esas ficciones había logrado colarse entre lo más visto de la plataforma a nivel histórico. Sin embargo, 'Dahmer - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer' ha roto con esa aparente decepción y ya se posiciona como el segundo mejor estreno de habla inglesa de la compañía tras haber encadenado muchos días como lo más visto. En concreto, en países como Estados Unidos ha estado tres semanas en lo más alto de manera ininterrumpida... hasta ahora.
Tras 21 días como la serie más popular de Netflix, 'Dahmer' ha sido destronada en territorios como el estadounidense. No obstante, esa caída es, paradójicamente, una gran noticia para Murphy y su equipo, ya que la producción que la ha desbancado es 'Vigilante', conocida originalmente como 'The Watcher'. La miniserie, protagonizada por Naomi Watts y Bobby Cannavale, se lanzó el viernes 14 de octubre, y no ha tardado en generar un impacto inmediato, aunque en países como España 'Dahmer' sigue llevando ventaja.
Naomi Watts en 'Vigilante'
A falta de datos concretos por parte de Netflix, que se aportarán el próximo miércoles cuando se actualice el top 10 global de la semana, el asalto de 'Vigilante' supone un cambio de percepción con respecto al acuerdo entre Murphy y el servicio. De hecho, tal es el hito que hasta Ryan Murphy Productions ha querido celebrarlo en su cuenta de Instagram: "Ese momento en el que tu nueva serie reemplaza a tu otra serie como la número uno en Estados Unidos".
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Al igual que 'Dahmer', 'Vigilante' basa su escalofriante historia en hechos reales. Los protagonistas de la ficción son Nora y Dean Brannock, un matrimonio que se muda a un idílico barrio tras invertir todos sus ahorros en la casa de sus sueños. Una vez asentados en esta nueva casa, empiezan a descubrir que el barrio que les rodea es mucho más extraño y amenazante de lo que creían, como demuestra la incómoda actitud de los vecinos que no paran de entrometerse, convirtiendo su cambio de residencia en un verdadero infierno.