Sofía y Gloria Camila llegan al límite en 'Supervivientes 2020': "La que va zurrando a la gente eres tú"

Que Gloria Camila Ortega y Sofía Suescun no se soportan es algo conocido por todos. Quién nos iba a decir hace unos meses, cuando saltó la noticia de que la ex gran hermana había iniciado una relación con el que fuera pareja de la primera, Kiko Jiménez, que las tendríamos cara a cara en un plató. Pero así es. Ambas se sientan cada gala de 'Supervivientes 2020' para defender a sus respectos: Ana María Aldón, por una parte, y Cristian Suescun, por la otra. Y ambas se enfrentan noche a noche en una cruenta batalla, aunque la de ayer pasó de castaño oscuro.

Todo empezaba cuando Jorge Javier, en su habitual modus operandi, picaba a Gloria Camila con Sofía. Esta le señaló con Suescun no se había enterado de nada, ya que estaba mirando el teléfono, lo que desencadenó la primera bronca entre ellas. "Estás obsesionada conmigo", espetaba la de Pamplona, que comenzó a atacar a su enemiga haciendo referencia a unas imágenes en las que se le ha visto en una peluquería durante el periodo de cuarentena: "Calva, que estás calva", gritaba Sofía.

Las descalificaciones comenzaron a ser cada vez más fuertes entre ambas. Gloria Camila sacó a relucir el conflicto que tuvieron ella y Jiménez con la policía de Marbella: "Paga, que todavía no has pagado", gritaba, mientras que Suescun recordó la pelea que protagonizó Gloria Camila con unas chicas hace cinco años. "La que va zurrando a la gente y tirando de los pelos eres tú", atacó la pamplonica, para rematar con un argumento muy bajo: "La sangre, que te viene de familia".

Gloria Camorra y Sofea

Después de sacar a relucir ambas todos sus pasados delictivos -también el de las familias-, Sofía decidió recurrir a lo que mejor se le da: intentar sacar de quicio a sus enemigos. Tras todos los ataques que profirió, decidió ir a por un mote y, haciendo un juego de palabras con el nombre de Gloria Camila, la bautizó como "Gloria Camorra". También le siguió llamando calva en innumerables ocasiones, algo a lo que la aludida no entraba al trapo, que prefirió acallarla con un "Sofea".