Solo una cosa intentó Errejón en 'El hormiguero': dejar claro que Íñigo no es Pablo

Íñigo Errejón era el segundo político que se adentraba en este nuevo proyecto de 'El hormiguero' de llevar a los candidatos a la presidencia del Gobierno al programa de cara a las elecciones generales del 10-N. El primero fue Santiago Abascal y, para el bien del candidato de Más País! y Pablo Motos, el ambiente no estaba tan tenso como en la semana anterior. La contrapartida fue que no lograron alcanzar las cifras de audiencia que se marcaron con el de VOX (2.089.000 y 11,5% frente a 4.049.000 y 23,5%). Aun así, el político logró su objetivo, dejar calada en la audiencia la principal consigna de su partido. Su mejor baza de cara al 10-N: Íñigo no es Pablo.

Cualquiera podría esperar que un partido progresista a quien echara a los perros sería al liberal. Eso es lo que hemos estado viendo durante la campaña de las pasadas elecciones: PSOE y Podemos vs. PP, Ciudadanos y VOX. Sin embargo, el de Más País! tiene muy claro quién es su enemigo, quién es el rey al que tiene que hacer jaque, y ese no es otro más que Pablo Iglesias.

Ambos empezaron en 2014 su andanza en política. De la mano, han dado pasos muy importantes, pero todo empezó a resquebrajarse cuando Errejón vio la oportunidad de postularse como cabeza de partido. Iglesias, a través de sus más fieles acólitos, hizo una campaña bastante dura contra su amigo, que terminó derrotado en el Vistalegre II y con alguna que otra puñalada de quien consideró en su día amigos (Las redes no olvidan, Echenique). Eso dejó una cosa muy clara al político, Podemos ya no era su sitio y así lo expresó en su entrevista con Motos: "No puedes estar en un sitio donde nadie te quiere", espetaba. Sin embargo, dilucidó ese no fue el motivo principal de su partida. Fue una razón con más peso: "diferencias ideológicas".

Y ahí es donde Errejón sacó la artillería pesada. Aquí vio la oportunidad de captar todo el descontento de la gente por tener que ir a unas nuevas elecciones. Vio la opción de llamar a todos aquellos que confiaron en Podemos cuando nació. "Nosotros no vamos a poner por delante del país las siglas del partido", primera puñalada. "En España no hay gobierno progresista porque pusieron por delante sus intereres que los del país", segunda. "Hablamos de nueva política y la política, hasta la nueva, ha envejecido muy rápido". Esa fue directa al corazón de Iglesias.

Errejón estaba culpando directamente a Pablo Iglesias de no haber formado gobierno. ¿Solo a Podemos? Bueno, aunque en ningún momento pronunció dichos nombres, quedaba muy claro a quién estaba tirando a los lobos. Y, sino, solo hay que escuchar lo que respondió a la pregunta de Motos sobre las diferencias entre ambos partidos: "La más importante es que los diputados de Más País! vamos a votar por un gobierno progresista para desbloquear el país".

Más cosas sobre Más País!

Una vez dejada la proclama, Errejón también tuvo tiempo para explicar algunos puntos vitales del programa de Más País!, como intentar establecer una jornada laboral de 32 horas, subir las pensiones acorde a las subidas del IPC, bajar la edad legal para votar a los 16 años y la que más cola está dando: la legalización de la marihuana. Motos debatió y rebatió algunos de los puntos y, todo hay que decirlo, lo hizo de una manera más amable que con Abascal. Eso sí, cortó algún punto en el que Errejón estaba haciendo gala del terminó justifique su respuesta.

Cataluña y Venezuela fueron los temas de actualidad que coparon la entrevista. El político criticó ambas situaciones. Sobre el problema patrio, condenó la inoperancia de los políticos y defendió el trabajo de los jueces. "Respeto la sentencia", explicaba, pero argumentó que, si gobernara, sí estaría a favor de un referéndum vinculante". Además, negó el apoyo a Sánchez en el caso de aplicar un 155.

También lamentó la situación del país sudamericano: "Venezuela está en una situación desastrosa y yo no quiero eso para mi país", expresaba, pero, como contrapartida, argumentó que, para él, Nicolás Maduro "no es un dictador". "Creo que en Venezuela algunas libertades se respetan. Allí, la oposición da ruedas de prensa y eso no pasa en una dictadura", argumentó.

'El hormiguero' vuelve a ser 'El hormiguero'

Motos, como hemos señalado, estaba menos tenso que con Abascal y esto le permitió hacer una entrevista más de 'El hormiguero'. Bromas sobre la edad de Errejón no faltaron, como también preguntas sobre Carmena y sus croquetas. Pero estaba cantado quién iba a ser el protagonista del chiste "más pesado" y ese no era otro que el protagonista indirecto de la entrevista, Pablo Iglesias: "¿Te llegaste a bañar en la piscina de Pablo Iglesias?", preguntaron Trancas y Barrancas. "No, no me invitaron", contestó un amable Errejón que, aunque lo intentó disimular, dejó entrever un poquitín de dolor. Su herida, como la de Iglesias de ayer, quizás esté aún sangrante.