Programa relacionado
Como suele ser habitual en las últimas semanas, los concursantes expulsados tienen la opción de volver por unas horas a la isla junto a sus compañeros. Es precisamente lo que ha sucedido con Ivana Icardi, que regresó a Cayo Paloma para reencontrarse con los aventureros de 'Supervivientes 2020'. Lo que poco podíamos imaginar es que la italiana iba a acabar enfrentada (de nuevo) con su exnovio Hugo Sierra. Los reproches, gritos y descalificativos han sido protagonistas de una tensa discusión derivada por la comida que esta ha traído a la isla. Un momento en el que ambos han evidenciado que por ahora, la reconciliación después del concurso parece imposible.
Ivana Icardi y Hugo Sierra, en 'Supervivientes'
Pero la cosa no ha quedado aquí y es que Hugo Sierra ha acusado a Ivana de querer propiciar este fuerte enfrentamiento para poder protagonizar entrevistas en platós y revistas cuando el concurso termine definitivo. "Quieres esto pero fuera", le ha reprochado, algo que Icardi ha aprovechado para desmentir, lanzando una directa pullita a Adara Molinero, la exnovia de Hugo. "Te piensas que soy como la otra persona, pero no me has conocido nada (...) lo que pasaba es que te molestaba que te ganase en todo", ha afirmado esta. Este zasca a Molinero ha tenido una contundente respuesta por parte de Hugo, tanto en ese momento como en directo en La Palapa. En una conversación con Jorge Javier Vázquez ha afirmado que "Ivana metió a terceras personas que no tienen nada que ver en la historia (...) ha metido a gente con sé que voy a tener en mi vida siempre". Unas palabras que han emocionado, y mucho a Elena Rodríguez.
Elena, muy emocionada con Hugo Sierra ('Supervivientes')
Elena, muy emocionada
Esta no ha podido reprimir las lágrimas al ver la predisposición de tener una buena relación con su hija Adara cuando termine el concurso y se reencuentren. Paralelamente, y tras este emotivo momento, los espectadores han podido ver lo que sucedió después de esta discusión en la isla. Ivana Icardi y Hugo terminaron reconciliándose, dándose un emotivo abrazo y pese a dejar claro que no van a volver nunca, terminaron acercando posturas. La italiana quiso dejarle claro a su ya exnovio que "no soy una desquiciada, quería solo respuestas (...) no tengo ningún tipo de rencor" y le recordó que su mayor enfrentamiento vino porque ella le ganó en algunas pruebas.