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'Supervivientes: Tierra de nadie' alcanzó su duodécima cita semanal el martes 23 de mayo, en Telecinco, en la que Carlos Sobera dio paso a una nueva ceremonia de salvación. En esta ocasión, fueron Raquel Arias, Manuel Cortés Bollo, Artùr Dainese y Alma Bollo los protagonistas de una votación en manos de la audiencia que se resolvió con la salvación de la sevillana.
Dado que Cortés aún continuaba apartado de sus compañeros por motivos de salud, el sevillano "presenció" la ceremonia desde la residencia en la que se encontraba, bajo la supervisión de los médicos, y donde tendría que permanecer algo más de tiempo, tal y como él mismo y Sobera habían explicado minutos antes de conocer la salvación de su hermana, en una ceremonia que se llevó a cabo de forma express, sin el habitual barco.
Manuel, Artùr, Alma y Raquel en la ceremonia de salvación de 'Supervivientes: Tierra de nadie'
Dada su situación, Laura Madrueño quiso saber qué sentiría de ser el primer salvado eta semana. "Sería una alegría inmensa por todo lo que estoy viviendo, no solo por esto, que es una piedra en el camino. Creo que estoy haciendo una supervivencia ideal para el programa", defendió Cortés, a lo que añadió que "nunca me he salvado en el barco y eso me haría volver con toda la ilusión y todas las ganas".
"Voy a seguir dándolo todo"
Arias fue la primera en descubrir que su concurso seguía en peligro, a la que siguió Cortés y, finalmente, Dainese. Se confirmaba así que Bollo tenía garantizada una semana más de reality, para alegría tanto de la sevillana como de su hermano, que aplaudió al conocer la noticia. "Muchas gracias a toda la gente que me sigue apoyando, que sigue confiando en mí. No sabéis lo especial que me hacéis sentir. Os quiero mucho y voy a seguir dándolo todo", manifestó Bollo, al borde del llanto.
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