La séptima gala de 'Supervivientes' se saldaba con el destierro al Palafito de Chelo García-Cortés y su posterior salvación frente a Carlos Lozano. El presentador veía como se terminaba su paso por las playas hondureñas tras más de mes y medio sobreviviendo, tiempo que le ha servido para cerrar heridas del pasado con la madre de su hija y "reconciliarse" con su expareja más reciente, Miriam Saavedra.
Carlos Lozano y Miriam Saavedra besandose en 'Supervivientes 2019'
La ganadora de la sexta edición de 'Gran Hermano VIP' llegaba a la isla como "fantasma del pasado" dispuesta a convivir unos días con su ex en el Palafito. Ambos han aprovechado el tiempo para conversar y han evitado discutir, ocupando sus días yendo a pescar, a cazar cangrejos... Actividades que han propiciado un rápido acercamiento entre la expareja, que ha terminado hasta compartiendo una romántica comida.
Tan intenso ha sido el acercamiento que Saavedra ha terminado apoyada sobre las piernas del presentador mientras este organizaba los alimentos, momento en el que se producía el inesperado beso. Lozano explicaba a la peruana que frutos están listos para pelar y cuáles hay que dejar que maduren, cuando al ver que las cámaras se alejaban un poco ha aprovechado para plantarle un beso en la boca.
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¿Otra oportunidad?
Un beso que puede suponer la reconciliación de la pareja tras la expulsión del periodista madrileño del concurso. Ahora que ambos se encuentran en territorio español y Mónica Hoyos sigue perdida en Honduras, puede que sea el mejor momento para darle una nueva oportunidad a su historia de amor, una historia que hace aguas desde sus comienzos pero que sus protagonistas se niegan a dejar definitivamente atrás.