©Atresmedia y MediasetLa okupación es uno de los asuntos que trae de cabeza a muchos ciudadanos españoles, asunto que los magacines de actualidad no dudan en tratar en sus habituales tertulias. Durante el mes de agosto, un caso ha llamado en especial la atención: Carmen, una mujer de casi noventa años, no habría podido volver a su casa, por la que está pagando un alquiler. Tal y como alegó la familia, su supuesta cuidadora marroquí había decidido okupar la vivienda donde ambas residirían.
Carmen Franquelo, en 'Cuatro al día'
Diferentes periodistas han ido recopilando significativos datos que arrojarían luz, llegando a afirmar que esta historia podría calificarse como un "bulo". El origen del conflicto radica en que se habría estado realquilando el piso de renta antigua, situado cerca de la madrileña Paza Mayor, para obtener un beneficio, pese a que el contrato lo prohibía expresamente.
Una de las nietas de Carmen llegó a aparecer en 'Espejo público verano', contando un relato presuntamente diferente a la realidad: el piso no se había realquilado nunca, sino que su abuela salió de la vivienda a consecuencia de la pandemia para vivir con su familia. Igualmente, ese "pago de alquiler" no podría gozar de tal consideración, puesto que se trataría de "gastos compartidos", tal y como la denunciante aseguró.
Todo habría sido una invención
Ante la creciente mediatización de este caso de okupación, muchos medios se pusieron manos a la obra para recabar todo tipo de pruebas para asegurarse de cuál era la versión que más se ajustaba a la realidad. El diario El país, entre otros, se dispuso a revelar que la joven acusada de ser okupa no era cuidadora de la anciana, pero, además, paga el alquiler estipulado en un contrato.
