'Polònia', el programa de sátira política emitido en TV3, prescindió en 2019 del humorista Toni Albà después de que publicara un tuit ofensivo supuestamente dirigido a Inés Arrimadas, actual líder de Ciudadanos. No obstante, el espacio producido por Minoría Absoluta ha decidido recuperar al actor, que volverá a imitar a Juan Carlos I y también se meterá en la piel de Alfred Bosch, ya exconsejero de Acción Exterior de la Generalitat de Cataluña.
Toni Albà en 'Polònia'
Ambas figuras públicas han sido noticia durante las primeras semanas de marzo de 2020: el rey emérito por un presunto cobro de comisiones y Bosch por haber dimitido tras destaparse los casos de acoso sexual de su exjefe de gabinete. Así, el programa de la televisión pública catalana quiere volver a contar con las imitaciones de Toni Albà para los sketches que se grabarán próximamente.
Según recoge Elnacional.cat, el actor ha aceptado la oferta de Toni Soler, creador y productor de 'Polònia', volviendo así al programa para el que trabajó desde sus inicios hace 13 años. El humorista ha reconocido a través de Twitter su regreso y ha anunciado que tiene unas "ganas enormes de volver a abrazar a su otra familia". "No me lo esperaba, pero en vistas de cómo está rompiendo todo el asunto del rey, pensé que estaría bien hacer un gag" declaró al citado periódico digital dando a entender que abordará estos asuntos de actualidad desde una perspectiva cómica.
El tuit de la polémica
Toni Albà publicó en febrero de 2019 un tuit que decía lo siguiente: "¡Buen viaje a Waterloo! (Vigila que no te pases de largo y vayas a parar a Ámsterdam. Allí, estarías como en casa y, además, tendrías todos tus derechos laborales respetados)". Por esas fechas, una delegación de Ciudadanos viajaba al municipio de Bélgica para mantener una conversación con Carles Puigdemont y el humorista habría hecho una referencia al ejercicio de la prostitución en Holanda.
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Unas declaraciones que despertaron multitud de críticas y el rechazo por parte de la productora de 'Polònia'. Toni Soler expresó que ese comentario no tenía "ni puñetera gracia" e Inés Arrimadas se sintió aludida por dicha publicación: "El odio del nacionalismo no tiene límites. Este colaborador estrella de TV3, que se lleva un pastizal pagado por todos los catalanes, vuelve a atacarme por mis ideas, esta vez con un insulto machista y repugnante".