La traición de la niñera de Rocío Carrasco que denunció a Fidel por maltrato: "Fue una marioneta más"

La noche del miércoles 7 de abril, 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' emitió su sexta entrega en dos partes, dada su extensa longitud. Un episodio en el que Rocío Carrasco continuó reviviendo algunos momentos de las dos últimas décadas de su vida, entre ellas, la doble traición que cometieron dos de sus niñeras, Mari Cruz e Irma. De hecho, la segunda habría cometido una doble traición, al haber confabulado con Antonio David Flores a espaldas de Carrasco e incluso denunciar falsamente a Fidel Albiac.

"Fue una marioneta más de una trama donde, si Fidel no se ha ido por narcotráfico o por proxenetismo, a ver si lo ponemos de maltratador y nos lo quitamos", declaró Carrasco, al recordar las declaraciones de Irma contra su pareja, una niñera que trabajó para ella desde 1999. "Viene a mi casa un día, llorando, y me dice: 'tengo que contarte una cosa. He hecho una cosa que no está bien y tengo que explicártela", recordó la madrileña, que incluso contaba con un documento firmado ante notario en el que Irma explicaba lo ocurrido, por petición de la propia Carrasco. En el texto sellado ante notario, se recogía cómo Antonio David "llamó a la exponente para decirle que iba a recogerla, para que viese al hijo menor de la citada Doña Rocío". "El referido Antonio David le manifestó a la exponente, que si iba al programa 'Tómbola', le entregaría una suma importante de dinero y que no se preocupase, que si tenía algún problema le asesoraría su abogado", recopilaba el texto.

En el documento también se recogía que, según Irma, Flores le pidió que "debía de estar de parte del citado Antonio David, porque él haría lo posible para quitarle los niños a Doña Rocío Carrasco". Asimismo, el excolaborador de 'Sálvame' también le habría entregado a la niñera "un móvil para ponerse en contacto con ella y evitar usar el del domicilio de Doña Rocío". "Él siempre ha dicho que no podía tener contacto con los niños y en mi casa había una línea solo y exclusivamente para que el padre llamase. Y aquí está la prueba", apuntó Carrasco, tras lo cual prosiguió exponiendo las declaraciones de Irma, a quien Antonio David le habría indicado que abandonase el domicilio de Carrasco para "contar en el programa 'Tómbola' lo que le dijese" el excolaborador y "también en el Juzgado que llevaba la separación". "Entre todos lo que tenían era un chiringuito para desprestigiarme y conseguir lo que el padre quería", declaró Rocío quien, ante la confesión de la niñera, "mi sentimiento de terror iba creciendo, porque no me podía fiar de nadie". "Me estoy dando cuenta de que va a por todas, a por los niños, y va a hacer cualquier cosa", manifestó Carrasco, antes de calificar dicha actitud de "mafiosa".

Una denuncia sin "pies ni cabeza"

"Cuando ella me cuenta esto, deja de trabajar para mí, al poco tiempo, no porque yo la eche", relató Rocío, quien por entonces "considero un acto de buena fe que ella me cuente la realidad". "Tiene un período en el que va y viene, y termina sucumbiéndose a lo que un día se negó", prosiguió Carrasco, quien supuso "que las circunstancias de su vida cambiarían y necesitaba dinero o cualquier otro tipo de cosas". "Lo que hace es ir al director de una revista a decir que Fidel me maltrata", rememoró la madrileña, algo que no habría salido publicado porque "no pueden publicar semejante cosa si no tienen la certeza de que hay una denuncia de por medio". "Entonces, esta mujer se va al Juzgado y pone una denuncia contra Fidel", contó Rocío. Dicha denuncia, "a las dos horas, se archiva", por lo que "no se me da ni traslado de la denuncia, porque ven que no tiene ni pies ni cabeza, pero ya teníamos la portada".

Aquello fue suficiente como para que lo ocurrido corriera como la pólvora, momento en el que Carrasco trabajaba en 'Día a día', programa en el que la madrileña comenzó a notar las miradas de sus compañeros tras conocer la noticia, de la que se enteró entonces. "Me pasé toda esa mañana llorando de impotencia. Sigo creyendo en la Justicia y voy a seguir de su mano. Es lenta, pero llega", declaró Carrasco, impotente ante el hecho de que se publicase "esa barbarie", hasta el punto de que lanzó unas contundentes declaraciones en el programa de Telecinco con las que desmintió las acusaciones de maltrato contra su pareja. Una aparición que Antonio David habría vuelto a aprovechar a su favor, apuntando al hecho de que Carrasco se había tapado un cardenal con maquillaje, trampa en la que cayó Massiel y motivo por el cual fue demandada. "Una vez más, este señor utiliza a otra persona para decir lo que él quiere decir", acusó Rocío, tajante, después de aclarar que el supuesto moretón eran tan solo ojeras.