Los anhelos de Kosovo por formar parte de Eurovisión han encontrado un nuevo escollo en el camino este fin de semana, después de que se rechazase una reforma de los estatutos que abrían la puerta a su participación en el festival. El cambio, promovido inicialmente por Croacia, Eslovenia, Hungría, Macedonia del Norte y Montenegro, pretendía eliminar la membresía en la Unión Internacional de Telecomunicación (UIT) como requisito previo a la entrada en la UER.
La anulación de dicho requisito allanaba el camino de la Radio Televisión de Kosovo (RTK) para convertirse en miembro de pleno derecho de la UER y, por consiguiente, en participante del certamen de la canción. Un total de 673 votos se opuso a los 400 votos a favor y las 113 abstenciones; un rechazo frontal a una medida que necesitaba la aprobación de tres cuartas partes de la Asamblea General de la UER, es decir, de 889 del total de 1.186 electores. En el proceso Chipre, España, Grecia y Serbia solicitaron el voto secreto.
La entrada de Kosovo en Eurovisión tendrá que esperar
La televisión serbia RTS ha sido uno de los mayores opositores a la entrada de Kosovo en la unión de radiodifusión. "Los miembros de la UER han aceptado el argumento de RTS de que esto es una decisión política y puede crear un precedente que dañaría la paz en la región y la determinación de la UER de ser una organización profesional y no política", afirmó Milivoje Mihajlovic, el director adjunto del canal serbio.
Kosovo se declaró país independiente de Serbia en el año 2008 con el apoyo de Estados Unidos y una amplía mayoría europea. Sin embargo, todavía hay una treintena de países que se oponen a su reconocimiento internacional. Entre ellos, se encuentran miembros de la UER como Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Bosnia y Herzegovina, Chipre, Georgia, Grecia, Israel, Moldavia, Rumanía, Rusia y Serbia sin olvidar a nuestro país, España.
Eurovisión, el gran deseo kosovar
Los kosovares llevan años intentando participar en Eurovisión. La normativa se lo prohíbe salvo que reciba invitación expresa del Grupo de Referencia de la UER o de la televisión anfitriona, tal y como ocurrió en 2018. La portuguesa RTP realizó entonces una propuesta a RTK que, sin embargo, fue bloqueada alegando la ausencia de Kosovo en la ONU. Una vaga justificación que, en realidad, podría esconder el veto de países como Serbia.
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Viendo la postura de varios de los miembros, la televisión de Países Bajos es la última -y lejana- esperanza de Kosovo para debutar al fin en Eurovisión 2020. Curiosamente, RTK sí participó en Eurovision Young Dancers en el año 2011, aunque no consiguió clasificarse para la final. Esto fue posible gracias a que la televisión kosovar goza de un estatus propio que le permite disfrutar de algunos servicios de la UER.