Jaime Caravaca se ha convertido en un tema de actualidad tras haber sido agredido por un hombre al que le dejó un comentario muy fuera de lugar en redes sociales, haciendo referencia a su hijo de tan solo tres meses. "Nada ni nadie podrá evitar la posibilidad de que sea gay, y de mayor se harte de mamar p*lla de negro. Y de negro obrero, nada de futbolistas. Qué sabio es el tiempo, toca esperar", escribía el cómico, que trabajó en 'La resistencia'.
Alberto Pugilato, que pertenece a movimientos de derecha radical, fue el hombre que le propinó dos golpes al humorista, indicando que lo hacía por los "comentarios pedófilos". El vídeo de la agresión se ha hecho viral y a raíz de esto, Jaime Caravaca ha pedido disculpas. "Tras lo sucedido, lo que pretendía ser un chiste, finalmente ha sido un comentario desafortunado y nada apropiado por mi parte. Mis disculpas a las personas que se sientan afectadas. Aparquemos la violencia, y dejemos un buen mundo para que las personas crezcan libres", escribía Caravaca.Jaime Caravaca
Este episodio ha generado mucho debate y ha provocado también la reacción de Valeria Ros, que ha decidido exponer los comentarios que este hombre le suele dejar también en sus publicaciones. "Todo mi apoyo a gente que tiene que lidiar con comentarios dolorosos en RRSS y a la cara ya resulta que se acojonan. Parece que no sólo va a por nazis. Es un misógino de mierda y solo quiere llamar la atención. Que conmigo no se cruce", escribía la colaboradora de televisión.
Todo mi apoyo a gente que tiene que lidiar con comentarios dolorosos en rrss y a la cara ya resulta que se acojonan. Parece que no sólo va a por nazis. Es un misógino de mierda y solo quiere llamar la atención. Que conmigo no se cruce. pic.twitter.com/alYA8mAuzQ
— Valeria Ros (@VALValeriaRos) June 4, 2024
Pugilato acepta la disculpas
Tras las disculpas de Jaime Caravaca, Pugilato las ha aceptado, dejándole el siguiente mensaje. "Acepto tus disculpas, Jaime. Defiendo la libertad de expresión de la misma manera en la que defiendo el derecho a responder. No te deseo ningún mal y espero que esto sirva para que otros comprendan que los niños son sagrados", concluía.