El estreno de la cuarta temporada de 'Vis a vis' no ha dejado indiferente a nadie, y es que la serie de FOX España y Globomedia nos ha brindado un episodio a la altura de la ficción recogiendo el relevo en alto que dejó el final de la tercera temporada. Zulema, Altagracia y Saray de regreso a la cárcel y la llegada de Sandoval como nuevo director de Cruz del Norte han centrado las tramas, ¿pero ha sido todo positivo? Analizamos, por ello, los puntos fuertes y débiles del estreno de la cuarta temporada.
Puntos fuertes del estreno de 'Vis a vis'
1 La tensión constante, su gran aliado
Te deja sin respiro. 'Vis a vis' es así, especialmente desde su paso a FOX y gracias a las novedades de formato. El no tener que contar con más de una hora de capítulo ayuda a concentrar la esencia de las tramas importantes, sin dar vueltas por otras que carezcan de sentido al conjunto de la serie, como ocurrió en la segunda temporada. En este aspecto, la ficción ha mejorado notablemente, y es que constantemente ocurren cosas, exprimiendo al máximo los minutos. Este primer episodio no baja el ritmo y ya desde el principio no le dejan tiempo a la pausa entre el plan de fuga de Zulema, las maldades de Sandoval y la llegada a prisión de Altagracia.
2 Zulema regresa con ganas de fugarse
Adriana Paz como Altagracia en 'Vis a vis'
Zulema es la estrella de 'Vis a vis' y una temporada más vuelve a demostrarlo y parte de ello es gracias a Najwa Nimri y lo integrado que tiene el personaje. Tras una enésima fuga echada por tierra, Zahir es capturada y enviada de vuelta a Cruz del Norte, pero antes de llegar a la cárcel tendrá que superar el viaje en avión. O mejor dicho: tendrán que superarlo los policías que la custodian. Es ahí donde conocemos a Hierro (Benjamín Vicuña), quien es incapaz de resistir sus encantos y acaba malherido en el baño tras tratar de tener sexo con ella.
Zulema vuelve guerrera y sin ganas de recuperar su celda y, precisamente por ello, asistimos a una de las muestras de inteligencia a las que nos tiene acostumbrados. Es capaz de preparar un plan de huida al momento y no solo eso, sino que logra llevar sobre sus hombros toda la carga dramática de esa trama. No solo Hierro cae rendido a sus pies, también todos los espectadores.
3 La maternidad de Saray
Alba Flores nos regala una de las escenas más sinceras que hemos visto en la serie. El momento en el que tiene sobre sus brazos a su hija y le canta una nana dota de gran humanidad no solo a Saray, sino también a 'Vis a vis', que en los últimos episodios había perdido ese componente tan valioso de profundizar en los problemas y necesidades de sus personajes.
La maternidad va a ser el concepto que remueva por dentro a Saray durante toda la temporada, tanto en su guerra contra Zulema como en la que va a vivir con Sandoval, a quien tendrá que tratar con cuidado si no quiere perder a su pequeña. Saray se ha posicionado como una de las grandes bazas de la serie y lo demuestra con cada intervención, como la que vive en su primer encuentro con el nuevo director, que pasa de la comedia al terror en cuestión de segundos. Además, si la trama está bien llevada, podremos ser testigos de la representación de una de las realidades de la cárcel: ser madre dentro de prisión.
4 Altagracia como presa y Sandoval como director
Ramiro Blas como Sandoval en 'Vis a vis'
Adriana Paz y Ramiro Blas van a ser el desahogo dramático de Najwa Nimri en esta temporada. Tras la marcha de Maggie Civantos, el personaje de Zulema tuvo que cargar con todo el peso de la serie; sin embargo, tras este primer episodio, dos nuevos pilares van a ayudarle en esta tarea. La primera es Altagracia, quien vive una de las mayores desgracias dentro de Cruz del Norte: tener en su contra a las presas, dado el trato que las hacía vivir cada día, y a los funcionarios, pues estos no perdonan que matara a uno de los suyos. En el primer episodio tiene varios frentes abiertos que resiste estoicamente, pero lejos de transmitir una rendición por su parte, todo apunta a que Altagracia no se va a dejar amedrentar por nadie y buscará su oportunidad de venganza.
La vuelta de Ramiro Blas a la serie es una de las novedades con las que cuenta la cuarta temporada. Sandoval vuelve tras la mutilación sufrida la temporada anterior y esto no hará sino incrementar su maldad. Regresa un doctor, ahora convertido en director, sanguinario, psicópata y con todo el permiso de hacer de la cárcel su reino y su ley, tal y como demuestra con esa escena final en donde disfruta de un filete medio crudo mientras los perros atacan a Mercedes. Sandoval da verdadero miedo y sus técnicas pueden darle un punto terrorífico a 'Vis a vis' que le hacen crecer y evolucionar una temporada más.
Puntos débiles del estreno de 'Vis a vis'
1 La inverosimilitud del traslado en avión
La trama de Zulema tratando de fugarse en pleno vuelo es la que más acción recoge del primer episodio y donde vemos a la reclusa en pleno apogeo. Sin embargo, y por mucho que fascine la inteligencia de este personaje, no tiene mucho sentido urdir una fuga en mitad de un vuelo. Pero ya no solo eso, sino el hecho de que se traslade en un vuelo comercial junto al resto de viajeros. Si es una presa de máxima seguridad con un largo historial de muertes e intentos de fuga a sus espaldas, ¿no deberían de buscar un modo más seguro de trasladarle o, al menos, poner más seguridad que dos personas custodiándola?
2 Rizos, una temporada más en segundo plano
Berta Vázquez como Rizos en 'Vis a vis'
En la etapa de 'Vis a vis' en Antena 3, Berta Vázquez tenía bastante peso en las tramas gracias al vínculo de Rizos con Saray y con Maca. Sin embargo, en la tercera temporada se limitó a un repentino enamoramiento con Nerea, la policía compañera de Castillo, y todo apunta a que en esta cuarta seguirá los mismos pasos. En el primer episodio no tiene importancia ni apenas líneas de guion, y es una auténtica pena, pues Rizos era uno de los personajes más interesantes y con más personalidad de la serie.
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Sin embargo, aquí no acaban los problemas en relación a este personaje. El cargo que ostenta podría haberlo ocupado otra presa que le sacara más jugo, pero en Mercedes poco puede explotarse a no ser que cambie notablemente. Por otro lado, la escena final, pese a dejar en alto el episodio y mostrar la crueldad sin límites de Sandoval, resulta falta de credibilidad. Las presas podrían contar lo que hace el director y sus sanguinarios métodos, por lo que actuar ante tanto público puede dar pie a una política de terror efectiva, pero poco inteligente.