La pullita de Yurena a Alaska y Mario por su indiferencia tras la muerte de su madre, Margarita Seisdedos

Yurena se encuentra desolada desde que el pasado martes 22 de octubre falleció su madre Margarita Seisdedos, a los 91 años. Fue la cantante la encargada de transmitir la noticia a través de su cuenta de Instagram, donde le dedicó unas bonitas palabras: "Mi luz, mi estrella, mi vida, mi ángel, mi reina, mi aliento, eso has sido para mí, mamá, desde que nací hasta tu último aliento".

Seisdedos fue habitual en los platós de televisión en la década del 2000, a los que acudía para defender a su hija de las diversas polémicas en las que se veía implicada. En 'Sábado deluxe', espacio al que también había acudido en varias ocasiones, han recibido a Yurena para que abriera su corazón y homenajease a su madre. La exconcursante de 'GH Dúo', se ha mostrado desolada y perdida: "No sé qué hacer en estos momentos con mi vida". La muerte de su madre tras luchar contra el alzheimer y el párkinson durante seis años le ha afectado enormemente: "Mi madre se ha llevado mi vida".

En estos momentos tan duros, Yurena esperaba la comprensión e implicación de su entorno, por eso le ha dolido enormemente la actitud de Alaska y Mario Vaquerizo, que no se han puesto en contacto con ella para darle el pésame. Jorge Javier Vázquez ha querido tranquilizarla y restarle importancia al feo gesto, pero Yurena no perdona su indiferencia. En contraposición, Isabel Pantoja ha tenido el bonito detalle de ponerse en contacto con la exconcursante de 'Supervivientes 2016' para transmitirle sus condolencias, pese a que nunca han coincidido.

Fama en los 2000

Margarita Seisdedos se convirtió en una parte esencial de la vida de Yurena desde que decidió apoyar a su hija en su carrera musical: "Cuando me vine a Madrid dejó a su marido y su vida por venir conmigo". Pero también fue fundamental su apoyo en los platós de televisión, donde siempre defendía a su hija de las numerosas polémicas en las que se veía inmersa. Fue habitual en 'Crónicas marcianas', de Xavier Sardà, pero siempre será recordada por su bolso y fiel ladrillo, con los que no dudaba en amenazar a los paparazzi para proteger la intimidad de Yurena.