Brad Pitt

William Bradley Pitt es un actor estadounidense. Nació el 18 de diciembre de 1963 en Oklahoma, si bien a una edad temprana se mudó junto a sus padres y hermanos pequeños a Springfield. Allí acudió al colegio e instituto, donde destacó por su afición a los deportes.

Sin embargo, cuando llegó el momento de matricularse en la universidad, algunos podrían pensar que lo hizo directamente en arte dramático o una disciplina similar. Sin embargo, el actor se inscribió en Periodismo y a falta de dos semanas para terminar la carrera, decidió dejarlo porque se dio cuenta que aquello no era lo que realmente le llenaba.

El casi periodista que lo dejó todo para ser actor

Desde hacía un tiempo él tenía en mente que su futuro tenía que pasar por las cámaras y el mundo audiovisual y, por ello, de un día para otro decidió hacer las maletas y mudarse a Los Ángeles, pues allí era donde se movía la mayor parte de dicha industria.

Cuando llegó a la conocida como ciudad de las estrellas se apuntó a diversos cursos de interpretación, al tiempo que trabajaba de otras cosas para poder precisamente pagar estos cursos. No fue una época fácil, porque a pesar de que hoy día Brad Pitt es una de las figuras más populares de Hollywood por aquel entonces era un joven más de veinte años que soñaba con hacerse un hueco en uno de los lugares más complicados para hacerlo.

De cuando Brad Pitt empezó con papeles episódicos y no le llovían los proyectos

En 1987 lograba por primera vez un trabajo delante de la cámara. Lo hacía con pequeñísimos papeles en "Sin salida" o "En el fondo del abismo" y, si bien con el tiempo se ha visto que la mayor parte de su carrera la ha desarrollado en el cine, paradójicamente fue la televisión el medio que poco a poco dio a conocer a esta estrella emergente. Debutó en la pequeña pantalla con la serie 'Another World' y ese mismo año lograba aparecer en 'Trial and Error', la famosísima 'Dallas' o, un año más tarde, en 'Nuevos Policías'.

En 1988 se hacía con su primer rol protagonista en un largometraje. Se trataba de "La cara oculta del Sol", pero como se trataba de una producción de la por entonces reconocida como Yugoslavia, no fue hasta casi una década más tarde cuando esta película vio la luz, pues el estreno se vio empañado y finalmente perjudicado por el conflicto de los Balcanes.

De manera que, la película que pretendía relanzar, o al menos dar una posición privilegiada a Pitt tuvo que esperar y, mientras tanto, él seguía actuando en otras películas como "Happy Together" o "Demasiado joven para morir", esta última hecha para televisión. De modo que, mientras le llegaba su gran momento, la pequeña pantalla seguía siendo el medio predilecto para dar a conocerse. Participó así en 'Glory Days' o "The Image".

"El río de la vida" o "Leyendas de pasión", las películas que le pusieron en el foco mediático

Ahora bien, en 1991 lograba convertirse en el centro de atención gracias a su trabajo en "Thelma y Louise", filme en el que, a pesar de interpretar un pequeño papel, logró atraer las miradas de otros directores y de la prensa especializada. Ese mismo año se sumaba al reparto de "Johnny Suede" y en 1992 se metía en el papel de Paul Maclean en la película "El río de la vida". Esta era la primera vez que Pitt soportaba el peso protagonista de la cinta y, lo cierto es que salió muy bien parado, ya que la crítica se rindió a su trabajo, a pesar de que para el actor su trabajo fue muy mejorable.

Dos años después se sumaba a Tom Cruise, Kirsten Dunst y Antonio Banderas en "Crónicas Vampíricas". Aquella película le hizo especialmente famoso, si bien es cierto que su trabajo no fue de los más alabados por los más entendidos. Ahora bien, para resarcirse de las críticas ese mismo año estrenaba "Leyendas de pasión", película por la que fue nominado por primera vez a un Globo de Oro.

La década que le convirtió en leyenda

En 1995 participaba en "Seven" y ese mismo año estrenaba "12 monos". Precisamente por esta última recibió su primer Globo de Oro y además fue nominado por primera vez a los Oscar en la categoría de Mejor Actor de Reparto. Desde ese momento, Brad Pitt ya se erigía como una de las grandes promesas del séptimo arte y, aprovechando la popularidad que la crítica y los premios le habían dado, participó en numerosos proyectos como "Sleepers" o "La sombra del diablo".

A finales de los noventa se puso a las órdenes de David Fincher para "El club de la lucha", uno de sus papeles más icónicos y por el que literalmente lo dio todo, ya que para el personaje accedió a que le sacaran varias piezas dentales que, tras el rodaje, le fueron de nuevo colocadas. Ya en los 2000 participó en "The Mexican" y un año más tarde se sumaba al remake de "Ocean's Eleven" con un elenco de lujo formado por Matt Damon, George Clooney y Andy García. Desde ese momento, el nombre de Brad Pitt resonaba cada vez con más fuerza y, en 2004 su popularidad alcanzó niveles extraordinarios gracias a la película "Troya".

Un año después estrenaba "Sr. y Sra. Smith" y "Babel", película esta última por la que recibió buenas críticas y que le llevó a su segunda nominación a los Globos de Oro. Poco a poco Brad Pitt se iba convirtiendo en leyenda y a esa figura que es hoy contribuyeron títulos como "El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford", por el que ganó el prestigiosísimo Volpi del Festival de Venecia, así como "El curioso caso de Benjamin Button" o "Malditos Bastardos".

Desde ese momento Pitt se convierte en una auténtica estrella y sus proyectos pasan a estar al nivel del personaje en el que se había convertido dentro de la industria. Destacaron así "El árbol de la vida", "Moneyball: rompiendo las reglas", "12 años de esclavitud", "Corazones de acero", "La gran apuesta" o "Érase una vez en Hollywood", película por la que recibió el Oscar.

De su boda con Jennifer Aniston al fenómeno Brangelina que se disipó

Igual de popular ha sido su faceta profesional como la personal. Si bien sus primeras relaciones conocidas con Robin Givens o Juliette Lewis no trascendieron más allá de la pura sorpresa, desde que en 1994 iniciara un romance con Gwyneth Paltrow a Brad Pitt se le empezó a seguir la pista más de cerca. Ambos se conocieron en el set de "Seven" e incluso llegaron a comprometerse, pero en 1997 rompieron y decidieron tomar caminos separados.

En 1998 él conoció a Jennifer Aniston, la eterna Rachel de 'Friends' y con la que Pitt se casó en el 2000 en una boda celebrada en Malibú. Sin embargo, cinco años más tarde anunciaban su separación y ponían fin a un matrimonio que había provocado un auténtico fenómeno fan desde que su relación saliera a la luz.

Aunque los protagonistas aludieron a diferencias irreconciliables, solo un mes después de hacer efectivo el divorcio, unas imágenes de Brad Pitt con Angelina Jolie desataron todo tipo de rumores.

Ambos terminaron por confirmar que durante el rodaje de "Sr. y Sra. Smith" había surgido entre ellos algo más que una amistad, pero que en ningún caso él le había sido infiel a Jennifer Aniston. La verdad solo ellos la saben, pero para entonces el fenómeno Brangelina se extendía por todas las portadas del mundo. Ahora bien, eso no fue nada en comparación al bombazo mediático que supuso en 2006 la noticia de que la pareja esperaba su primer hijo en común. Ese mismo año Brad Pitt decidió adoptar a los hijos que Angelina Jolie había adoptado ella sola y en 2008 la actriz anunciaba que la pareja esperaba gemelos.

En 2012 y tras casi una década juntos se comprometieron y en 2014 se casaban en un escenario idílico de la Provenza. Ahora bien, lo que parecía un amor indestructible no sobrevivió al matrimonio, ya que en 2016 se separaron y en 2019 ambos pasaron a ser legalmente solteros. Desde ese momento la pareja empezó una dura batalla judicial por la custodio de sus hijos.