Chyler Leigh

Chyler Leigh West es una actriz estadounidense conocida por sus trabajos en 'Anatomía de Grey' y 'Supergirl'. Nacida el 10 de abril de 1982 en Carolina del Norte, la actriz creció en Virginia, hasta que, tras el divorcio de sus padres, se mudó junto a su madre y su hermano, el también actor Christopher Khayman Lee, a Miami.

Fue a una cortísima edad cuando Leigh empieza a hacer carrera como modelo en anuncios y pequeñas campañas publicitarias, por lo que cuando cumplió los dieciséis años su madre y ella volvieron a hacer las maletas, esta vez para trasladarse a Los Ángeles. Allí obtendría su primer éxito con la película "No es otra estúpida película americana", que coprotagonizó junto a Chris Evans y que se estrenó en 2001.

Una carrera precoz consolidada con 'Anatomía de Grey' y 'Supergirl'

Previamente, la estadounidense ya había participado en otras series como 'Safe Harbor' o 'Siete en el Paraíso', pero sería la película dirigida por Joel Gallen la que daría a Leigh un alto nivel de popularidad. Y es que, gracias a su personaje de Janey, en los años sucesivos lograría hacerse con roles protagonistas en series como 'El Show de los 80', 'Girls Club', 'El abogado' o 'Reunion'.

Ahora bien, el papel con el que mayor relevancia nacional e internacional alcanzaría sería el de Lexie Grey en 'Anatomía de Grey'. Leigh aparecía por primera vez al final de la tercera temporada durante apenas unos minutos, pero con su incorporación en la cuarta, tanto gustó su personaje a la audiencia y la trama que a su alrededor construyeron que su personaje terminaría por ser uno de los más queridos de la longeva ficción.

Con el fin de la octava temporada, la actriz anunciaba que dejaba la serie para pasar más tiempo con su familia y no volvería a ella hasta 2021, cuando participó en un episodio de la decimoséptima temporada que trajo de vuelta a algunos de los personajes más queridos de la serie a modo de regalo para sus fans.

Tras poner fin a su paso por 'Anatomía de Grey, la intérprete fichaba por 'Taxi Brooklyn' y, más importante por 'Supergirl', serie protagonizada por Melissa Benoist en la que Leigh ha sido la encargada de encarnar a Alex Denvers, un papel que la devolvió a la popularidad convirtiéndola en un ídolo y referente del mundo superhéroe. Con dicho papel, Chyler Leigh ha aparecido también en 'Arrow', 'The Flash' y 'Legends of Tomorrow'.

Así fue su lucha y la de su marido contra las adicciones

Aunque la actriz es una de las más discretas del panorama televisivo, lo cierto es que su vida no ha estado exenta de problemas y sucesos que bien podrían haber terminado con ella en una situación muy diferente. Y es que, primero el divorcio de sus padres y luego el hecho de que su madre volviera a casarse con el que había sido su primer marido y el alejamiento que vivió de su padre, provocaron en la intérprete una situación bastante difícil de gestionar.

A ello se sumó el hecho de que todavía siendo menor de edad empezara una carrera mediática que la llevó a rodearse de no muy buenas compañías, entre ellas la del que luego se convertiría en su marido, el también actor Nathan West. Ambos se conocieron en un casting, cuando ella tenía dieciséis años y él veinte. A esa edad empezaron una relación y ella decidió dejar a su familia para empezar una vida al lado de West. Sin embargo, ambos venían de un ambiente familiar cuestionable, como han reconocido y eso según ellos les hizo caer a ambos en las drogas.

La pareja entró en una espiral de autodestrucción que encontró su vía de escape cuando el director de la película "No es otra estúpida película americana" advirtió a Leigh de que su apariencia era enfermiza. Aquello motivó a la pareja a buscar ayuda, la cual encontraron en un grupo de apoyo en la iglesia. Afortunadamente pudieron salir de esa situación y en el 2000 pasaban por el altar. Solo un año más tarde daban la bienvenida a su primer hijo, algo que repetirían en 2006 y 2009.

En 2019 Leigh anunciaba que una década atrás le habían diagnosticado un trastorno bipolar y en 2020 confesó a sus seguidores haber pasado especial miedo y angustia al contraer el COVID-19, que la llevó a permanecer en la cama durante casi un mes y por el que casi acaba ingresada en el hospital.