Lindsay Lohan

Lindsay Dee Lohan es una actriz y cantante estadounidense. Nació el 2 de julio de 1986 en Nueva York, aunque lo cierto es que se crió en Long Island. Hija de una familia de ascendencia italiana e irlandesa, la intérprete es la mayor de cuatro hermanos, los cuales paradójicamente también se han dedicado al mundo del espectáculo.

Si bien Lohan se ha descrito siempre como una chica muy familiar, lo cierto es que la relación con su padre ha estado siempre llena de idas y venidas. A sus progenitores los acusó de ponerla a ella en medio en cada una de las discusiones que, finalmente, desencadenaron la separación definitiva del matrimonio en 2007. Desde ese momento el padre de la joven se dedicó a vender a los medios de comunicación conversaciones privadas de su hija y, por ello, Lohan quiso romper cualquier tipo de relación con su progenitor.

En 1989 ficha como modelo infantil de diversas marcas de moda y anuncios para televisión, hasta que en 1998 da el salto al estrellato internacional de la mano de "Tú a Londres y yo a California". Gracias a su papel en la película de Disney y a cómo supo encarnar a dos hermanas gemelas, la crítica la convirtió en un ídolo con tan solo doce años augurándole una de las carreras más longevas de Hollywood. Al año siguiente participó en la serie 'Bette' y en 2000 compartió protagonismo con Tyra Banks en la película "Una auténtica muñeca".

El ascenso a la fama mundial

En 2003 se suma al reparto de "Freaky Friday", película gracias a la cual recibió el MTV Movie Award en la categoría de Mejor Actriz Revelación. Un año más tarde protagoniza la que sería su primera cinta lejos del universo Disney, "Mean Girls" ("Chicas malas"). En ella, Lohan dio vida a la novata Cady Heron y de nuevo la intérprete fue aplaudida por la crítica. Como sucedió en 2003, su paso por la comedia adolescente fue premiado y Lindsay Lohan se convirtió en el nuevo ídolo de la juventud. En 2005 vuelve a la que fue su casa para ponerse al frente de "Herbie a tope", aunque en esta ocasión la crítica no fue tan unánime con el papel jugado por la estadounidense.

Ya convertida en una estrella nacional, decidió probar suerte en un mercado audiovisual más maduro. Lo hizo con la película "Golpe de suerte". Sin embargo, la actriz no salió nada favorecida de su estreno y fue entonces cuando decidió centrarse en personajes más pequeños, pero de mayor calidad y con un gran elenco a su alrededor. Apareció en "A Prairie Home Companion" junto a Meryl Streep, de la misma forma que trabajó mano a mano con Emilio Estévez en "El Día que mataron a Kennedy", así como con Jane Fonda en "Las Reglas de Georgia"

Un ídolo obligado a reinventarse

En 2009 se suma al reparto de "Labor Pains" y ese mismo año viaja hasta la India para rodar un documental de la BBC centrado en la trata de mujeres y niños. Por entonces, y a pesar de su juventud, Lindsay Lohan ya se había convertido en una estrella mundial y conocida por todos. Encarnó a la mismísima Elizabeth Taylor en la película "Liz & Dick" y participó en la quinta entrega de "Scary Movie".

Tras una época alejada de los focos y durante la cual tuvo que ingresar en una clínica de rehabilitación, en 2014 reaparece en el programa de Oprah Winfrey para contar el porqué de su desaparición pública. Tras hacerlo en un formato de ocho episodios, en 2017 vuelve a la actuación de la mano de 'Sick Note' en su segunda temporada. En 2019 se anunció su fichaje como jurado de la versión australiana del programa 'The Masked Singer'.

Estrella de la música

La estadounidense no solo ha triunfado como actriz y modelo, sino que en su curriculum también hallamos su faceta como cantante. Lohan cantó los temas principales de muchas de las películas en las que participó, como "Freaky Friday" o, más tarde, "Herbie a tope". En 2004 publicó su primer álbum, 'Speak', que recibió opiniones divididas. Un año más tarde lanzó al mercado su segundo trabajo, 'A Little More Personal', obteniendo el disco de oro.

En 2008 empezó a trabajar en el que habría sido su tercer álbum. Sin embargo, su paso por rehabilitación y el estrés que compaginar música y actuación podrían suponer en su recuperación, provocaron el aplazamiento sine die del mismo. En 2020, tras más de una década de silencio musical, Lindsay Lohan lanza el single 'Back to me', con el que anunciaba su deseo de volver a la música.

Una vida ligada al escándalo

Quién sabe si por sus tempranos inicios en la industria audiovisual o por la difícil situación familiar con la que ha lidiado a lo largo de los años, lo cierto es que la trayectoria de la estadounidense parece haber estado siempre más ligada al escándalo que a su faceta como actriz y cantante. Tras ingresar por primera vez en una clínica de rehabilitación para tratar su adicción al alcohol y las drogas, la actriz se escapó a los pocos días. En 2007 fue detenida por conducir ebria, pero lejos de amedrentarse por las consecuencias, solo unos meses más tarde Lohan fue de nuevo arrestada por conducir con el carné caducado y por llevar encima cocaína, obligándola a entrar en prisión.

En 2008 inició una relación con la DJ Samantha Ronson y un año más tarde afrontaba una anorexia y, de nuevo, volvió a sufrir un accidente de coche que la obligaba a presentarse todos los meses ante el juez. Ella se lo saltó, se marchó de vacaciones a Francia y fue arrestada. Este episodio la obligó a portar una pulsera telemática. En 2010 protagonizó un nuevo incidente y, tras estar en prisión durante unas horas, la actriz fue obligada a cumplir servicios a la comunidad. Paradójicamente estos servicios tuvo que desarrollarlos en una morgue en la que tuvo que amortajar los restos de la cantante Whitney Houston.

En 2016, y tras una larga lista de antecedentes y actitudes cuestionables, Lohan parecía haber encontrado la estabilidad junto a su novio, Egor Tarabasov. Sin embargo, una mañana alertaba a todo su vecindario con una tremenda discusión en la que acusaba a su pareja de haberla intentado estrangular e incluso tirarle ácido por la cara. El hecho de que ella dijera que todo estaba grabado y de que no interpusiera denuncia hicieron pensar que todo se trataba de un montaje por parte de la artista. Ambos siguieron juntos y meses más tarde volvieron a protagonizar una pelea con empujones de por medio en Grecia.

Finalmente parece que la actriz decidió dar por terminada la relación y desde entonces poco se pudo saber de ella. En 2020 se dijo que había iniciado un romance con Bader Shammas, gestor de patrimonio. Ninguno de los dos confirmó nada al respecto y, aunque se dijo que lo suyo no había durado, en 2021 fuentes cercanas a la pareja confirmaron que seguían juntos, pero que lo hacían con un perfil mucho más discreto.