Tracey Ullman

Tracey Ullman es una actriz y presentadora británica. Nació el 30 de diciembre de 1959 en Berkshire, Inglaterra. Su infancia no fue fácil, ya que su padre, que había sido militar polaco durante la Segunda Guerra Mundial, se recuperaba de una operación de corazón cuando desafortunadamente fallecía de un infarto delante de la propia Ullman.

Por entonces ella solo tenía seis años, pero eso le llevó a ser testigo de las dificultades económicas que atravesó su familia.

Su madre no podía hacerse cargo de todos los gastos sin el salario que hasta entonces entraba en casa por parte del padre de la intérprete. Sin embargo, ella se casó de nuevo y poco a poco lograron ver la luz al final del túnel.

De actuar como hobby a hacerlo en el West End de Londres

En aquella época, y con la idea de animar a su madre y al resto de la familia, Tracey Ullman y su hermana se dedicaban a hacer pequeñas representaciones teatrales por las noches. Puede que ese fuera el primer contacto de la británica con la interpretación, pero lo que quizás no sabía en ese momento era que lograría hacer de su hobby una profesión.

Y es que, durante su etapa en el instituto participó en numerosas obras de teatro escolares que un buen día cautivaron al director de uno de esos centros. Él recomendó a la familia de Ullman que se matriculara en una escuela de interpretación y así fue cómo logró una beca para la Academia Italia Conti en Londres.

Gracias a su paso por esta escuela, la intérprete lograba tiempo después ser una de las elegidas para participar en los numerosos musicales que tradicionalmente se han representado en el West End londinense.

Tras interpretar 'Grease' o 'The Rocky Horror Picture Show', en 1983 pasaba a representar el musical 'Starlight Express' junto al ya desaparecido Alan Rickman. En 1990 trabajaba con Morgan Freeman en 'La fierecilla domada' y desde entonces ha alternado su carrera frente a las cámaras con pequeños roles sobre las tablas de los escenarios.

Referente cómico de la televisión que le llevó a conducir su propio programa

En 1980 empezaba su trayectoria en la televisión de la mano de la serie 'Mackenzie' y un año más tarde la ficharían para el programa cómico que le cambiaría la vida, 'A Kick Up the Eighties'.

Decimos que este programa le cambió la vida porque tras pasar por él la televisión británica le ofreció su propio programa. Este se llamaría 'Three of a Kind' y en él tendría el lujo de contar mano a mano con el talento de cómicos nacionales como David Copperfield o Lenny Henry.

No cabía duda de que Ullman lograba irse abriendo hueco en un sector del entretenimiento que no siempre había sabido apreciar y reconocer el trabajo de las mujeres. Ella lograba convertirse en una pionera y en 1984 recibía su primer BAFTA.

Un año más tarde hacía las maletas y cruzaba el charco para establecerse en Los Ángeles con su marido, el productor Allan McKeown. Allí el representante de la actriz y presentadora estuvo moviéndose hasta encontrarle el trabajo que mejor se adaptara a ella, y vaya si lo encontraron. En 1987 estrenaba su propio show cómica en la pequeña pantalla estadounidense, 'The Tracey Ullman Show'. Con él la actriz y presentadora ganó tres premios Emmy y, a pesar del éxito, en 1990 decidía poner punto y final a esta aventura.

Por aquel entonces la británica ya era todo un personaje del entretenimiento norteamericano y, por ello, fueron muchas las ofertas que aceptó para hacer programas especiales en distintas partes del país.

Al mismo tiempo conseguía compaginar su carrera como presentadora con la de actriz, ya que en 1999 se hacía con el rol de una peculiar terapeuta en 'Ally McBeal'. Gracias a su intervención en la serie, Ullmann ganaba su séptimo premio Emmy.

Otros trabajos suyos en televisión han sido 'Once Upon a Mattress', 'Cómo conocí a vuestra madre', 'Howards End', 'Mrs. América' o 'Larry David', ficción esta última a la que se incorporó en 2021.

Como presentadora, en 2016 regresaba a la televisión británica con el programa 'Tracey Ullman's Show'.

Un flechazo que terminó antes de tiempo

A nivel personal como ya hemos señalado previamente, en 1983 Tracy Ullman contraía matrimonio con el productor británico Allan McKeown. Lo hacían apenas tres meses después de conocerse en un viaje en tren.

La pareja tuvo dos hijos en común y, desafortunadamente en 2013 McKeown fallecía víctima de un cáncer de próstata que dejaba rota a la televisiva. Desde entonces ella ha contado en numerosas ocasiones que cada paso profesional que da lo comparte de alguna manera con él, pues es a quién se dirige en sus ensayos e incluso le pregunta su parecer al respecto.

Por otro lado, cuando parecía remontar tras el fallecimiento de su marido, en 2015 fallecía su madre a consecuencia de un incendio iniciado de manera fortuita y que acababa con su vida a los 85 años.