Sinopsis
Andrés empieza a planear quedarse solo en casa para preparar su enfrentamiento último con Matías. Le pide a Adelina que vaya al colegio de Gloria para despedirse y que se lleven con ellas a Almudena, y estén fuera un par de días. También convence a Jaime, que quiere quedarse en Madrid para ayudarle con la fábrica, para que vuelva a Zaragoza y continúe allí sus estudios, es lo que su madre hubiese deseado. Miguel, preocupado por el bautizo de la hija de Chelo, que sigue adelante pese a todo, será finalmente el padrino actuando por poderes en nombre de Trino. Matías, por su parte, ata los últimos cabos antes del duelo y le pide a don Gonzalo que, si le ocurre algo, sea su albacea y defienda los interese de los hijos de Eulalia. Pedrito, convencido de que sólo un detective puede ayudar a su padre, hará todo lo posible por conseguir dinero para contratarlo. Sus hermanos, emocionados, contribuyen también a la colecta