Sinopsis
Tras unas horas de incertidumbre, Alberto ha recuperado finalmente el conocimiento y está ya fuera de peligro. Recibe una fuerte impresión al enterarse de que Eugenio Armenteros, al hombre al que pretendía matar, le salvó la vida y al mismo tiempo se angustia al saber que el teniente coronel va a intentar contactar con su familia. Cecilia insiste en visitar a Alberto en el hospital. Olavide la sorprende agradeciendo a Dios en sus oraciones la recuperación de Alberto. Desesperada por no haber podido aún enterrar a Viktor, Angélica suplica a Eugenio que interceda para que la policía entregue ya el cadáver. Trino hace ver a Marcelino y Manolita lo desconsiderados que han sido con Pelayo. Se produce por fin la reconciliación familiar y Pelayo admite, a su pesar, que el comunismo soviético no es el paraíso que él imaginaba. Felisa se entera de que Asunción tenía una relación con Héctor y Trino le advierte que no debe interferir.