El nombre del juego

Meredith e Izzie deciden pasar de los hombres y dedicarse a hacer ganchillo para distraerse. Tras su vuelta al hospital Bailey siente que su autoridad y fama de dura pueden estar en entredicho y hace todo lo posible para recuperar su reputación.

Alex tiene una paciente enferma terminal que miente a su hija sobre su salud y se niega a morderse la lengua ante esta situación. Ante esta actitud de Alex, Burke decide darle una lección. Mientras Meredith sigue teniendo incómodos y fortuitos encuentros con miembros de su familia.