Sinopsis
Sara, tras la muerte de Flor, ha permanecido un mes sin salir a penas de su casa. Y es que la inglesa no puede evitar sentirse culpable y en parte responsable del “accidente” sufrido por su amiga. Este nuevo golpe, sumado a la cercana muerte de Miguel y a la inocencia de Olmedo en el crimen, hacen que las fuerzas de Sara flaqueen, pese a que durante este tiempo, ha contado con el apoyo de Fernando, algo que ella le agradece profundamente.
Marcial, tras la muerte de su mujer, continúa desaparecido. Nadie en el pueblo sabe de su paradero, pero corren rumores de que vaga perdido por los caminos. En la cueva, sus compañeros de partida tampoco tienen noticias suyas. Juan se muestra preocupado, mientras que el Chato no puede evitar seguir pensando en Lupe, a la que apenas ha vuelto a ver desde que la chica abandonó su trabajo en el cortijo de los Montoro.
Y es que Lupe parece arrepentida de haber vuelto a la posada, y así se lo hace saber al Chato en una de sus sorpresivas visitas, dejando bien claro al bandolero que ella no está dispuesta a amar a nadie por la fuerza. Mientras, en el cortijo, Álvaro echa de menos a Lupe, hecho que le ha endurecido el carácter, lo que provoca nuevos enfrentamientos con Roberto, que tras su decisión de implicarse de lleno en la política, no ve claro su futuro en el esa casa. Es Teresa quien se ofrece como apoyo y anima a Roberto a que permanezca entre ellos.