Sinopsis
Andrés descubre que se ha convertido en un hombre sin aficiones. Su hija Blanca encuentra la vieja guitarra de Andrés motivo por el que el vendedor, cansado de la monotonía de su trabajo, recupera su afición a tocar el instrumento. Así que sienta a toda su familia en el salón y les ofrece un pequeño concierto. Las canciones son horrorosas y su sentido del ritmo nulo. Todos se dan cuenta pero para evitar que se desilusione le animan a que siga con su hobby. Elena confía en que pronto se olvide de la guitarra.
Leonor va a la tintorería a recoger un abrigo de Elena y allí se encuentra con una antigua amiga. La chica presume de lo bien que le va la vida desde que salió del pueblo y Leonor, envidiosa y humillada finge ser Elena y gozar de una buena posición social. La amiga le propone ir a verla a su casa. A pesar del intento de Leonor por no quedar, su paisana se empeña en volver a verse y quedan en la casa de Elena. La asistenta de Andrés intenta buscar una solución para que su amiga no se entere de toda la verdad.
Popi llega a casa muy contento porque ha conseguido trabajo. El empleo está muy bien remunerado y el esfuerzo que tiene que hacer es mínimo, pero el riesgo físico es muy importante. Popi ha aceptado una oferta para probar los medicamentos que está fabricando un laboratorio y a cambio tiene anotar todos los síntomas que los productos químicos le producen. Toda su familia está en contra de su nuevo trabajo, por el riesgo que tiene para su salud, pero aún así el decide seguir con el empleo.