Palabros

Una mujer, su hijo pequeño y su madre son evacuados de una casa en llamas y aparentemente todo el mundo está a salvo hasta que los bomberos descubren dentro el cuerpo de una adolescente, que se suponía que no estaba en casa esa noche.

Los agentes del C.S.I. piensan que el incendio ha sido provocado por un pirómano profesional, pero con el descubrimiento del cuerpo de Sabrina Abernathy empiezan a buscar a un asesino.

En el comienzo de la investigación, Viva Charles, una mujer con un expediente repleto de tentativas de incendios, parece la principal sospechosa. En el interrogatorio, Viva declara que tiene problemas para controlar sus impulsos, aunque insiste en que 'nunca quemaría una casa con niños dentro'.

La madre de la chica, Jessica, tiene un seguro mínimo sobre la casa, por lo que no tendría mucho que ganar. Por otra parte, Sabrina había expuesto un caso de una inocentada en un artículo del periódico de su colegio y el equipo abre una nueva línea de investigación, aunque sin demasiadas pistas.

Un filtro de cigarrillo en la casa de los Abernathy les aporta la pista que necesitaban. Jessica asegura que nadie fuma en su casa, pero descubren que Martha, la madre de Jessica, mentía acerca de su adicción a la nicotina. ¿Pudo la abuela haber provocado el incendio en el salón? Jessica había estado encerrando a su madre en su habitación por las noches para prevenir cualquier accidente.

Con esta declaración, el equipo descubre que han estado mirando en una habitación equivocada de la casa de los Abernathy y que también habían fallado con el miembro de la familia que creían sospechoso.