Sinopsis
Los agentes de Nueva York investigan la muerte de dos modelos de un peculiar desfile y, gracias a este suceso, intentarán dar caza a una banda internacional de traficantes de droga. Del mismo modo, los forenses se enfrentan al asesinato de una curandera cuyo cuerpo aparece cubierto de sanguijuelas.
La semana de la moda de Nueva York se prepara para un desfile muy especial en el que las modelos únicamente desfilarán con el cuerpo cubierto de pintura. Una de las modelos cae muerta encima de la pasarela y Mac, Hawkes y Danny se desplazan para investigar este intrigante caso. Pero, lejos de que la tragedia termine aquí, otra de las chicas decorada con pintura fallece y los agentes se centran en encontrar el punto de unión entre las dos muertes.
La autopsia revela la existencia de restos de éxtasis en los pulmones de la primera modelo y los C.S.I. descubren que la droga se encontraba impregnada en la pintura que recubría su cuerpo. Sorprendentemente, la segunda chica no murió por la misma causa: la modelo sorprendió a un contrabandista de droga reclamando el importe de su multimillonaria pintura.
Por otra parte, un hombre afirma haber matado a una mujer e indica a los forenses el lugar exacto en el que ha cometido el crimen. Inmediatamente, Lindsay y Stella acuden al lugar del crimen y encuentran una espeluznante escena: la víctima tiene el cuerpo entero cubierto con sanguijuelas. El equipo descubre que la mujer se dedicaba a la medicina alternativa y que había prometido curar al asesino de una enfermedad terminal. Pero, cuando el caso parece estar cerrado, aparece en el cuerpo de la curandera un relicario con una misteriosa fotografía que hace que los forenses tengan que replantearse la autoría del crimen.