La primera temporada de 'Dead to Me' se estrenó completa en Netflix el 3 de mayo de 2019 y está formada por 10 episodios. En su primer año, la comedia negra de Liz Feldman obtuvo críticas favorables y Christina Applegate recibió múltiples nominaciones a mejor actriz por su papel (Emmy, Globos de Oro, Critics' Choice, SAG, etc.). En junio, Netflix anunció su renovación para una segunda temporada.
Jen Harding (Applegate) es una agente inmobiliaria que está lidiando con la muerte de su marido, Ted, que fue atropellado por un conductor que se dio a la fuga. Para ello se une a un grupo de apoyo, donde conoce a Judy (Linda Cardellini), que ha perdido a su prometido, Steve (James Marsden). Aunque son muy diferentes, las dos acaban haciéndose amigas. Sin embargo, cuando Jen descubre que Judy ha mentido y en realidad su marido sigue vivo, se enfada con ella. Judy le explica que el verdadero motivo por el que acude al grupo es para procesar el dolor por sus abortos. Pero todo se complica cuando se desvela que el coche de Judy tiene daños que coinciden con el accidente de Ted.
Jen y Judy hacen las paces y Judy se muda a la casa de invitados de Jen. Mientras, Steve quiere vender su casa y contrata los servicios de Jen. Judy empieza a espiar a Steve y este pide una orden de alejamiento contra ella. En un flashback vemos a Judy en el coche que atropelló a Ted, con Steve de acompañante en el vehículo. Más tarde, Judy le cuenta a Steve que Jen es la viuda del hombre que atropellaron. Steve le pide que guarde el secreto, pero Judy se siente cada vez más culpable. Jen vandaliza un coche y Judy asume las culpas para protegerla.
Jen utiliza el ordenador de Ted y empieza a recibir mensajes de una tal 'bambi88', con la que parecía estar teniendo una aventura. La mujer resulta ser una camarera llamada realmente Bambi. Jen y Judy van a su trabajo a conocerla y cuando le informan de que Ted ha muerto, Bambi le explica que Ted le había dicho que su mujer estaba muerta, lo que cambia en retrospectiva la relación de Jen con su marido. En un flashback se desvela que Judy quería ayudar a Ted después del accidente, pero Steve se lo impidió.
A continuación, Jen y Judy acuden juntas a un retiro espiritual, donde Jen liga con un viudo y Judy conoce a un policía llamado Nick (Brandon Scott), que se ofrece a ayudar a Jen en la investigación de la muerte de su marido hablando con la agente a cargo del caso, Ana Perez (Diana-Maria Riva). Mientras, el hijo adolescente de Judy, Charlie (Sam McCarthy), está experimentando con drogas que ha robado de su padre y Henry (Luke Roessler), su hijo menor, también se está metiendo en problemas en la escuela.
Judy vuelve al garaje y descubre que el coche con el que atropellaron a Ted ha desaparecido. Por otro lado, Jen le lleva a la agente Perez una pieza de coche que encontró en la escena del crimen, que es identificado como un Mustang del 66, el modelo de Judy y Steve. Jen, Judy y Nick empiezan a visitar a los dueños locales de ese modelo de coche y Judy entra en pánico. Además, Judy cree estar embarazada y cuando va a decírselo a Steve, descubre que él está con otra mujer, ocultándole la información sobre el coche. Nick descubre que Judy y Steve son los dueños del vehículo.
En la recta final de la temporada, Nick interroga a Steve, que dice no saber nada del accidente. Por otro lado, Judy acude a la policía y entrega a Steve por blanqueo de dinero. Jen se culpa a sí misma de la muerte de Ted porque la noche del accidente tuvieron una gran pelea. Finalmente, Judy confiesa todo a Jen. Furiosa, Jen vacía la casa de invitados y amenaza a Judy con matarla con la pistola de su marido si la vuelve a ver. Jen le cuenta todo a Perez, pero no procede con el arresto porque arruinaría la investigación contra Steve. Mientras, Steve va a casa de Jen en busca de Judy y admite todo. Jen saca la pistola y lo amenaza. Paralelamente, Judy está intentando suicidarse, pero no lo consigue y vuelve con Jen, descubriendo el cuerpo de Steve flotando en la piscina.