Sinopsis
Es temprano por la mañana. A los hermanos Earp los echan del Bella Union después de pasar la noche con prostitutas. Seth le da a Martha la combinación de la caja fuerte de la tienda por si ocurre alguna “eventualidad”, y ella entiende que se refiere a “los hombres que llegaron anoche”. Y Joanie y Mose preparan la nueva escuela para la llegada de los niños.
Mientras, Hearst le deja claro a su lugarteniente, Barrett, que el pueblo debe saber que sus nuevos pistoleros han llegado y no tiene objeciones si eso se sabe provocando alguna pelea en las calles. También le ordena que se meta con Merrick.
Swearengen habla con Dority, Adams y Burns sobre los agentes de la Pinkerton contratados por Hearst y si les queda alguna opción para conseguir refuerzos. Se ven interrumpidos por varios pistoleros que llegan cabalgando y casi atropellan a Wu. Swearengen se pregunta por su capacidad para que no le provoquen: “Hasta que tengamos refuerzos, ¿podremos aprender a ser como ratones de iglesia?”
Adams visita a Tolliver para averiguar si tiene algún mensaje para Al acerca de los jinetes de la noche anterior. Poco inclinado a mostrar su propio nerviosismo, Cy simplemente le replica: “Dile a Al que dado que al levantarnos no hemos visto el Apocalipsis, supongo que sólo debemos temer sus Winchesters”.
Langrishe pasa para comprobar cómo se encuentra Hearst de la espalda y éste le presenta a Tía Lou. Hearst le pregunta cuál ha sido la reacción de Swearengen a la llegada de sus hombres y Langrishe le ruega que le permita ser neutral.