Sinopsis
Emilia, con la complicidad de Mariana, disculpa la ausencia de Francisca con la excusa de que ha salido de viaje para contratar un investigador. Raimundo pide ayuda a Tristán y a Pedro sin contarles toda la verdad...
Sebastián explica a Francisca la situación. Ayala y sus hombres quieren su dinero y harán lo que sea para conseguirlo. La cosa pinta muy mal para la señora Montenegro.
Gonzalo está furioso con el responsable del ultraje a María. Fernando no deja entrar a Gonzalo a ver a María y deja caer de forma muy sutil a don Celso que su pupilo no ha sido todo lo casto que debería.
Don Celso y Gonzalo se enfrentan a cuenta de su futuro. El sacerdote pierde los nervios y le abofetea. Mientras tanto Fernando intenta convertirse en el principal apoyo de María.
Hipólito acude a la comida “familiar” a la que le ha invitado Quintina. Hipólito se da cuenta de que Rogelio es un aprovechado.
María despierta y pregunta por Francisca. Emilia le cuenta lo mismo que a los demás.
Los hombres de Olmo abordan al hombre que vive en la casa que visita el profesor de piano. Olmo interroga a Jesús. Pese a que intenta convencerlo asegurándole que no va a por él sino a por Luis, el hombre no suelta prenda sobre la misteriosa mujer.
Ayala va a hacer a Francisca una demostración de sus métodos. Para ello, se lleva a Sebastián. Francisca cree volverse loca mientras escucha como torturan a Sebastián en la habitación de al lado.