Sinopsis
Para sorpresa y disimulando el disgusto de Nazaria, Vicente viene a quedarse una temporada. Y así, Mauricio le ofrece trabajo en la finca: si es responsable y trabajador, todo irá bien. Adela intercede por Severo, él también lo está pasando mal. Candela recapacita y le da la razón, debe cambiar de actitud. Pero Venancia les recuerda de nuevo tanto mal como están sufriendo y estalla una disputa entre ellos que parece imparable. Venancia, desde su cuarto, luce una sonrisa de satisfacción; esto es justo lo que ella pretendía. Está resarciendo maquiavélicamente la muerte de su hijo, el difunto marido de Candela.
Tiburcio sigue mostrándose distante. Nicolás explica a Dolores que lo hace por su bien y buen nombre. Ella entiende que puede hacer lo que quiera y así habla seriamente con su hijo: tiene derecho a vivir su vida. Prudencio es claro con Julieta: Francisca no cede y mientras Saúl esté con Julieta, no moverá un dedo por él. Prudencio es claro, solo si se aleja de su hermano, será libre.