Sinopsis
Los Castañeda se ponen en marcha para tratar de localizar a Camelia, y cuando llegan a la plaza se encuentran al General Pérez de Ayala esperándoles con la niña. Todos tratan de calmar el ánimo de los Castañeda, y por mucho que Emilia pida a Francisca que actúe para librarlos del General, de momento cree que es mejor no intervenir. Adela se enfrenta al General Pérez de Ayala y él le habla de los hijos de una forma que hiela la sangre; debe echar mucho de menos a Ulpiano…
Prudencio vuelve agotado y sin noticias de Julieta y se encuentra con que Saúl le acusa de ser el responsable de la situación, así pues, se lanza a buscarla él mismo si su esposo decide bajar los brazos. Lo primero que hace es acudir donde Consuelo, que le hace ver que su nieta puede pasar días alejada de civilización: ella cree que estará en el bosque y que no se dejará encontrar con facilidad.
Julieta está en el bosque y parece dispuesta a no regresar a la vida de la que ha escapado. Mientras, Prudencio tiene que admitir que su hermano ha ido a buscar a Julieta mientras él está aquí. Y en el bosque, finalmente, Saúl y Julieta se encuentran. Sobran las palabras: se besan apasionadamente. Dolores y Tiburcio vuelven de viaje de novios y todos intentan retrasarles el momento del disgusto lógico de cuando se enteren de la clausura del Colmado.