Sinopsis
Álvaro se desvive por atender a Elsa, temiéndose lo peor: quizás no estuviera tan inmunizada ante la enfermedad como decía. Pero luego comprueba que lo que tiene Elsa es agotamiento y le obliga a tomarse una noche de descanso: por primera vez parece querer buscar un acercamiento con ella. Eustaquio Molero les enumera una lista de agravios y se marcha sin más dejándoles muy mal sabor de boca; su aparente tranquilidad resulta inquietante a pesar de lo imposible que parece que su hijo salga indemne del ataque. Antolina insiste en dar por hecho que Elsa busca algo con el doctor e Isaac la frena pidiéndole que no vuelvan a mencionar a Elsa en casa: ya está bien de hablar de ella, si ha salido de sus vidas, que sea para bien. María trae malas noticias de Prudencio: parece que se muere. Avisan a Saúl que se topa con Francisca cuando viene a ver a su hermano. No es el encuentro que le gustaría. Saúl informa a Julieta de lo que le ha informado en La Casona: su hermano se muere si no lo operan y cuentan con su sangre. Julieta empieza a desesperar porque parece que el destino está empeñado en que ella y Saúl no puedan disfrutar ni un día de su amor. Ya no hablan de bodas, o hijos, solo de amenazas. Dolores se entera ahora de que Francisca no estaba muerta y se desmaya del impacto.