Sinopsis
Pablo explica a D. Ignacio y Marta que se sintió vigilado por dos hombres y en una de las estaciones, la guardia Civil les detuvo, iban armados. Confiesa que decidió escapar, convencido que los detenidos iban a por él. Carolina irrumpe en la sala y su padre intenta frenar el cariñoso recibimiento de los jóvenes. El capitán Huertas y Solozábal cavilan sobre lo ocurrido y el primero cree que ahora es mejor que Pablo permanezca escondido; al parecer, la actuación militar contra la sublevación estaba prevista, mucho más allá de la declaración que Pablo le hizo al juez. Marta descubre que el alcalde acostumbra a pagar de su propio bolsillo las necesidades más acuciantes de algunos de sus vecinos, pero Mauricio le pide absoluta discreción. Marta se desahoga con Manuela y le confiesa que teme que el amor por Adolfo no deje de crecer, siente que debe de apartarse de él. Carolina y sus hermanas apremian a su padre para convencerlo de que el sitio más seguro de Pablo es con su familia, pero el empresario no tiene nada decidido. Pablo se presenta en la fábrica y pide a D. Ignacio permiso para quedarse, le promete que evitara cualquier relación íntima con Carolina, pero Solozábal debe de reflexionar. Será Urrutia quien le aconseja decir la verdad.