Sinopsis
Manuela acaba de despertar y todas intentan saber cómo cayó. Doña Begoña y Rosa temen su relato, pero la gobernanta les asegura que tropezó y fue la señora la que le socorrió. D. Ignacio intenta esquivar las preguntas de Adolfo sobre J. Pierre y comparte con Pablo su desasosiego y le cuenta que el francés es un sinvergüenza que sedujo a la marquesa y trató de robarla, pero descubrió sus intenciones y le obligó a marcharse. Le amenazó con demostrar que fue el asesino del marqués y J. Pierre puso tierra de por medio. La marquesa no le ha perdonado y le culpa de su amor frustrado.
Pablo y D. Ignacio visitan a Manuela y comprueban que va mejorando, pero regresan a la fábrica ya que la falta de Urrutia y la dejadez de Ramón se notan. Pablo y Carolina comunican a la familia que van a casarse, pero la noticia no es bien recibida. Doña Begoña y su marido, creen que son demasiado jóvenes. Encarnación visita furtivamente a Manuela y ésta le confiesa que no cayó por accidente, sino que Doña Begoña la empujó.
La marquesa quiere evitar que su amante regrese a Paris, quiere vivir una segunda oportunidad, pero él se excusa y culpa a Solozábal, convencido que intentará impedirlo. Doña Isabel confía en que ahora son parientes y puede hacerle entender que la muerte de su esposo fue, en realidad, un accidente.