Sinopsis
Año 1865. Un soldado de la Unión entra en una iglesia católica a confesar sus ‘malos’ actos incalificables cometidos durante la Guerra Civil. "Háblame de Meridian", le pide el sacerdote antes de dispararle. El sacerdote es en realidad Cullen Bohannon, un antiguo soldado.
En un salón de lujo, Thomas ‘Doc’ Durant explica el proyecto del ferrocarril Union Pacific a acaudalados inversores, provocando los aplausos cuando lo compara con las pirámides de Egipto y el Gran Muralla de China.
En un tren en dirección al oeste, Cullen conoce a dos hermanos irlandeses inmigrantes, Mickey y McGinnes Sean, que están leyendo lo ocurrido con la muerte en la iglesia católica. Los tres hablan sobre sus creencias religiosas y, además, coinciden en buscar trabajo en la construcción del ferrocarril.
En Iowa, Daniel Johnson, el capataz del ferrocarril, contrata a Cullen para supervisar a los trabajadores negros que forman la cuadrilla encargada de preparar el terreno para la construcción del ferrocarril. Johnson trata a los libertos como un antiguo maestro de esclavos y Cullen lo comprobará a través de sus sucios trucos. "Algunas cosas no cambian nunca", murmura Elam Ferguson, uno de los libertos de la cuadrilla.
Por otro lado, el reverendo Nathaniel Cole bautiza a Joseph Black Moon, indígena cheyenne, en el río Missouri. Más tarde, los dos llegan al campamento itinerante que acompaña a la expansión occidental de los ferrocarriles. Cole señala a las prostitutas y borrachos reunidos y le dice a Joseph que levantarán la carpa iglesia al lado de ellos. "Nosotros hacemos nuestra propia conversión aquí", les advierte una prostituta.