Capítulo 4

Juan y Esther (Irene Montalà) forman una familia feliz. En el ámbito laboral, la capacidad de liderazgo de Juan suscita el interés de un sindicato nacional que le ofrece un importante cargo y el mayor de los hermanos Torres decide entonces reencontrarse con los suyos. A diferencia de Juan, Alberto es consciente de que su matrimonio con Pilar hace aguas a pesar de los intentos de ambos por concebir un hijo. Cuando Juan y Alberto se reencuentran tras años de separación, descubren que la vida los ha situado en extremos opuestos a nivel profesional: Juan es un líder sindical y Alberto se ha convertido en un importante empresario vinculado al poder político.

Durante el encuentro con su hermano, Juan conoce a Marta, la hija de Virginia que vive con Alberto desde que Julia, la abuela de la niña, ya no pudo hacerse cargo de ella debido al Alzheimer que padece. La convivencia de Marta en la casa de Alberto crea nuevas tensiones entre el empresario y su esposa Pilar. Mientras, Virginia es enviada a cubrir la Guerra de los Balcanes, donde es secuestrada por un grupo de militares serbios. Tras conocer la noticia, Alberto utiliza su poder y contactos para que la periodista sea liberada. De regreso a España, Virginia decide quedarse definitivamente en Madrid junto a su hija y su madre y a partir de entonces las vidas de los tres amigos vuelven a unirse.