Sinopsis
Un adolescente, Dan, va a visitar a su novia que está enferma. La madre de Melinda le hace desinfectarse antes de entrar en la habitación aséptica donde está aislada la chica, que acaba de recibir un transplante de corazón. Ella se queja de que la tienen prisionera y le pide que se quite la mascarilla y la bese. En ese momento sufre una crisis de alergia que casi la mata, hasta que entra la madre en la habitación y le inyecta el antialérgico.
Mientras, House y Wilson siguen compartiendo piso. Wilson le informa de una llamada de la doctora Cuddy anunciando el caso de la chica con la crisis anafiláctica. A House de inmediato le interesa el tema y se va al hospital. El equipo está muy confundido con los síntomas de Melinda, la joven que acaba de pasar por un transplante de corazón y vive aislada en una habitación aséptica. Los médicos creen que o bien su novio metió algo que no ha dicho en la habitación, o ella salió de su cuarto.
Foreman habla con la familia porque le parece que no es necesario que mantengan a Melinda aislada. Entonces la madre le cuenta que ha estado a punto de morir cuatro veces en su vida por reacciones alérgicas, la última de las cuales tuvo lugar mientras la chica conducía y provocó un accidente que le costó un transplante de corazón. Bárbara siente que todavía no es lo suficientemente protectora con su hija.
Cameron y Chase examinan la habitación de Melinda: una ventana no tiene sistema de alarma y está muy cerca de la rama de un árbol. Los médicos creen que Dan, el novio de Melinda, lo escaló para estar con ella y cuando le preguntan en el hospital confiesa que sí lo hizo. Además, practicaron sexo sin protección. Le tienen que hacer un examen de semen, por si Melinda es alérgica, pero los resultados dan negativo.
House coge al chico por banda y trata de descubrir si ha tomado algún medicamento que haya provocado la reacción alérgica de su novia. Él reconoce que tomó penicilina del padre de un amigo para estar muy sano y no contagiarle nada a la chica. Cameron y Chase le cuentan a Barbara que Melinda ya puede dejar el hospital aunque no quieren decirle el motivo de la reacción alérgica. De repente, la joven no puede respirar y vomita. Cameron se da cuenta de que ahora se trata del corazón.
El equipo se reúne para analizar las dos piezas de distintos puzzles que tienen ante ellos. La crisis anfiláctica y los problemas de corazón no están en absoluto relacionados entre sí. Mientras, en su casa, House pregunta a Wilson si se le ocurre algo que relacione problemas del corazón y anafilaxis. Wilson ni le hace caso, está que trina por las faenas que le está haciendo House en la convivencia.
Todas las pruebas que le han hecho a Melinda dan negativo y cuando Formean y los padres van a la habitación ven que la chica ha desaparecido. Cuddy moviliza a la seguridad del hospital y Foreman cree que la chica quiere estar al aire libre, así que sube corriendo a la azotea. Se la encuentra sentada en las escaleras y se queja de que su madre es sobreprotectora. Mientras bajan, Foreman nota que la chica camina de una forma extraña. La examina frente a sus padres y descubren que Melinda está empezando a sufrir una parálisis que va ascendiendo. Este último síntoma acabará con su vida en poco tiempo si no descubren a qué se debe.
La parálisis asciende por el cuerpo de Melinda muy rápido. Los análisis, que descartan la polio y el virus del Nilo, parecen indicar que se trata de Guillain-Barre por la velocidad de su avance. El primer tratamiento no surte efecto y la chica cae de lleno en una depresión. Barbara cree que su hija se ha dado por vencida y esto la aterroriza, prefiere que se enfrente a ella y siga siendo rebelde. Los médicos llaman a House, que hace memoria para recordar todo lo que se dijo durante el diferencial: alguien habló de la infección que podría provocar una garrapata. Es posible que al saltar la valla de la casa, Dan llevara consigo el insecto hasta la habitación de Melinda. House examina todo cuerpo pero no halla nada.
Entonces Melinda sufre una parada cardiaca. Sus padres ya no confían en House y la directora Cuddy le ordena que se aleje de la paciente. Ahora la tienen que llevar a la UCI y House aprovecha el momento del traslado para colarse en el ascensor. A pesar de la resistencia de Foreman, House da al botón de parada y aprovecha para examinar a la joven en profundidad. Por fin encuentra la garrapata: estaba en la vagina. En ese momento se abren las puertas del ascensor y House muestra el insecto mientras Melinda se estabiliza.