Sinopsis
Samuel sigue teniendo el sueño recurrente en el que aparece una mujer vestida de rojo que le pide ayuda. Aún no sabe quién es, ni logra descifrar qué necesita, pero el estado de agobio y miedo de la mujer, le abruma.
Una vez que Sam se ha dado cuenta que este "viaje" a 1977 no va a ser cuestión de quince minutos, decide ir a visitar la casa de sus padres, aunque sea para mirar desde la calle y ver qué tal están.
Cuando está a punto de llegar, ve a un hombre dar una brutal paliza a otro, y decide intervenir, deteniendo al matón. Anita, que se encuentra con él en ese momento, le ayuda y juntos hacen la primera detención de la mujer policía. El agredido es un viejo conocido de Samuel quien, obviamente, no le reconoce.
Para su sorpresa, sin embargo, al llegar a comisaría se entera que el detenido trabaja con el mafioso local, que a su vez tiene relaciones y conocidos en el poder: amigos y lazos en el antiguo régimen, influencias aún muy presentes en la sociedad de fines de los setenta.
Así, asiste decepcionado a la liberación sin cargos del agresor. Samuel se enfrenta a Gallardo, llamándole inmoral y diciéndole que esto "de donde él viene" le valdría la suspensión del cargo, pero sus palabras caen en saco roto y sólo provocan risas y mofas de sus compañeros.
Durante la visita a su barrio Samuel conoce a sus padres, y logra una especial conexión con su madre. Utiliza un pretexto para entrar en casa, lo que le trae dulces y emotivos recuerdos de su infancia. Su sorpresa y temor aumentan cuando ve que el padre tiene un regalo para su madre: un vestido rojo, muy similar al de los sueños. Sam piensa: "¿es mi madre quien está en peligro y me pide ayuda desesperadamente?".
Ana, le ayuda, diciéndole que se tome las cosas con calma y que tiene que haber una explicación para lo que le sucede. Ella no sabe qué creer, pero sí sabe que se siente atraída por este policía recién llegado, que sin duda es especial. Samuel a su vez, le anima a soportar los malos momentos que tiene que pasar producto del machismo de la época y le asegura que "es sólo cuestión de tiempo". misma y en el futuro. La atracción entre ambos es evidente, aunque ninguno la reconozca.