Capítulo 4

Antes de que María regresara a Calabria, Italo le ofreció la oportunidad de no volver nunca más y liberarse de sus matrimonio ficticio. Molesta y decepcionada, la mujer regresa a casa para ayudar a su hermano Giuseppe, gravemente enfermo, y el corazón le da un vuelco porque ve a Antonio, su primer amor: él fue quien salvó la vida de su hermano. Antonio es ahora un hombre de éxito: le cuenta sobre los negocios hechos en Bélgica, sobre su empresa de construcción, le dice que quiere involucrar al joven Giuseppe en la empresa. Él también confiesa que nunca la ha olvidado. Sin embargo, María sigue pensando en Italo, Vittorio, Paolino y su la vida en la granja. Ella regresa a casa, un día, cuando encuentra a Italo, quien se ha dado cuenta de lo que realmente siente algo por ella y está allí para llevarla a casa con él. Su amor produce grandes transformaciones en su vida privada y para su trabajo. El mundo está cambiando y durante una pelea en una protesta sindical, Vittorio cae enfermo.