A pelo y a pluma

Natalia está muy enfadada con Sergio porque le ha hecho despedir a todos los invitados de la fiesta que ella misma organizó para su reconciliación. Por ello, divide con una cinta la casa en dos. Una parte para ella y la otra para Sergio y su hija. Le declara la guerra. Sergio se desahoga con Lola y ambos se miran con deseo.

Mientras, Elisa le dice a su padre que Lucas se está enamorando de una mujer, de Lola. Lucas se declara a Lola, está enamorado de ella. Lola le dice que está confundiendo sus sentimientos y que para aclararse lo mejor es que le bese en los labios. Lucas así lo hace. En ese momento entra Sergio y les ve.

Paula se incorpora a la radio y allí se encuentra a Olga, que ha usurpado su puesto. Pero la situación será arreglada por Martín. Olga va a llorar a Arzuaga, quien le aconseja que pida una baja por depresión. Paula regala a Boggie unos vaqueros como signo de agradecimiento.

Tigre está decidido a dedicarse íntegramente a la música. Para eso tiene que dejar su trabajo en la agencia. Pide consejo a Vicky, ella le dice que haga que le echen para que así, al menos, tenga paro. Tigre consigue hacer que Aguirre se enfade y que le despida.

Carol está dispuesta a aplacar las voces y ruidos que se oyen en la agencia, ella cree que se trata de espíritus. Acude vestida con todo tipo de artilugios para limpiar las malas influencias, como si fuera una médium. Lola es la única que parece poner un poco de cordura en todo esto. Se reúnen para hacer la guija y el vaso comienza a moverse rápidamente. Todos quedan asombrados.