La cocina de Babel

Manuel Lobo consigue la libertad de Tito Soares mientras se enfrenta a un plante de su yerno Jaime que decide dejar el despacho, llevándose algunos clientes.

La policía tiene pinchados los teléfonos de todos los allegados a Alonso Soares. Muller contrata a un traductor para que le traduzca unas cintas que están en una extraña lengua, que resulta ser un dialecto altaico que él desconoce. Finalmente dan con una mujer, Inga, una anciana de 80 años que puede descifrar su contenido. Muller se da cuenta de que hay frases que pueden inculpar a Soares. Los abogados de Soares descubren la jugada y éste ordena a Abel que “neutralice” al traductor.

Por fin van a leer el veredicto del jurado del caso Tito Soares. Manuel consigue ganar el juicio y lo celebran en el despacho. Tito aparece allí con una gran mesa de billar de regalo. Es el momento en el que Tito conoce a Lucía y se queda embobado con ella. Por su parte, Alonso Soares teme que su hijo comenta otra tontería ahora que ha quedado en libertad. Le pide a Abel que sea su sombra.

Carmen tiene a un tipo, Quino Ramírez, acusado de haber matado a su novia. Su madre le defiende a muerte y cuando Carmen dicta prisión preventiva, la madre le dice que así le destrozará la vida. Carmen se queda fatal cuando la madre le asalta por la calle y empieza a destrozarle el coche. Su hijo se ha suicidado y acusa a Carmen de ser la culpable. Ha dejado una carta en la que se declara inocente y en la que dice que él ni siquiera conocía a la chica. Carmen decide investigar.

Jaime anuncia a su suegro que va a dejar el despacho. Carmen se disgusta con la noticia y Lobo se muestra muy enfadado cuando descubre que Jaime se va a llevar clientes. Carmen se enfrenta a su padre y le acusa de haber tratado mal a su marido.

Chacón, el médico que atendió a Lobo cuando tuvo la angina de pecho, acude a pedirle ayuda como abogado. Un paciente suyo murió y la viuda le ha puesto una querella. Cuando acuden al despacho del Juez de Instrucción, Lobo se entera de que Chacón administró al muerto un medicamento de dudosos efectos en casos de hipertensos agudos. El caso da un giro importante cuando Manuel descubre que Chacón cobraba una cantidad importante de los laboratorios de fármaco que recetó a cambio de dar unas conferencias sobre los beneficios del compuesto.