Sinopsis
La familia Castillo intenta pasar desapercibida y su secretismo contagia a todos, incluso a los más pequeños de la familia, Lucía y Carlitos, que intentan no disgustar a sus padres ni distraerles con fiestas o reuniones. Así que cuando se enteran de que en el colegio se va a celebrar un festival de integración social entre padres e hijos, deciden resignarse y no hacerse ilusiones.
Pero Mario no está dispuesto a esconder a sus hijos como si fuesen delincuentes y, sin pensárselo dos veces, decide apuntarse, con todas las consecuencias. Algo sencillo para una familia normal, pero para los Castillo es, sin duda, un reto. ¿Cómo van a mantener la apariencia de una vida corriente frente a los padres y la incisiva Rosa Ruano?
Mario está dispuesto a correr riesgos y Jimena, aunque más ajena a la propuesta, sigue encontrando pistas indescifrables en la libreta que Silvestre les dejo como única brújula para encontrar a su hija. Y es que los padres y los niños no sólo serán los que se vayan de fiesta, ya que Sandra y sus compañeros de clase serán invitados a una fiesta en casa de Leo. Una noche que promete desfase y diversión, y que Hugo y Lucas no quieren perderse… cueste lo que cueste.
Este encuentro será también una buena excusa para que Culebra, excluido en los planes de Leo, decida hacer una contraoferta a sus compañeros de clase, otra fiesta en un lugar emocionante… y peligroso: Villa Dorita.