Sinopsis
Homer remodela el sótano de la casa comprando varios objetos divertidos, mientras que Bart y Lisa disfrutan de los juegos. Marge admite ante Homer su preocupación financiera, y él le dice que tiene un plan que consiste en declararse en bancarrota, guiándose por un vieja ley del código fiscal. Así es como una jueza le ofrece a Homer un agente financiero para supervisar el recorte de gastos.
Homer acepta y reduce un gasto importante y decide desalojar al abuelo del asilo para que viva en la casa de Los Simpson. El abuelo resulta ser un fastidio en la casa y cuando Homer y Marge salen, Marge llama a Selma para ayudar al anciano a cuidar a Maggie.
En el momento en que ellos salen a pasear, el abuelo y Selma se besan y entonces Homer se enfurece mucho, pero a él no le importa y siguen saliendo.