La temporada 16 de 'Los Simpson' no para de mostrar aventuras y desventuras de una familia a la que le pasa de todo. Esta tanda de capítulo tiene como protagonista en sus primeras entregas a Marge. Uno de sus sueños ganar un concurso culinario que llevaría su cara a los envases de una marca alimenticia. Sin embargo, los candidatos buscan torpedearla y estropear sus perritos calientes dulces, pero un colirio, el remordimiento de conciencia y una cerradura recién pintada provocan que todo cambie.
Esas buenas intenciones se ponen sobre la mesa cuando busca ayudar y dar cobijo a Nelson Muntz. Pese a ser el enemigo por excelencia de su hijo Bart, Marge quiere darle una nueva oportunidad. ¿Conseguirá que se lleven bien y formen un tándem inseparable? Tiempo después, la madre de familia de pone manos a la obra para reflotar el Bar de Moe, lo que termina por despertar los celos en Homer. ¿Soportará la presión?
Hablando de Homer, se reconvierte en algo inesperado: cuando Springfield deja de atraer turistas, se ponen en marcha para legalizar el matrimonio homosexual. El padre de familia empieza a trabajar como reverendo e incluso acaba casando a Patty Bouvier. Por otra parte, se encargará de representar a su hija Lisa como estrella de la canción y hasta tendrá una conversación con Dios, el único personaje de la serie con cinco dedos.
La religión vuelve a tener peso en uno de los capítulos de esta temporada. ¿Qué ocurrirá si Homer y Bart acaban abrazando el catolicismo? Sus comportamientos cambian hasta el punto de no reconocer su manera de vida. ¿Le tomarán por loco? En este caso no, pero su amigo Ray Magini pondrá en jaque la salud mental de Homer, ya que nadie consigue verlo, pero Stephen Hawking tiene la clave para dar respuesta a este hecho tan extraño.