Sinopsis
Natalia, a pesar de no tener pruebas concluyentes, lanza en su informativo la noticia de que el suero Acosta, recientemente comercializado, puede estar envenenado. Las reacciones se desencadenan en seguida. El Ministerio de Sanidad ordena analizar las partidas de suero distribuidas en los hospitales para encontrar que... no tienen ninguna sustancia nociva. Ricardo no tiene más remedio que despedir a Natalia, aunque gracias a la inesperada intervención de Aurora y sus influencias en la cúpula de la cadena, es readmitida de nuevo.
Ajena a los problemas de su madre, Tania, que ha escapado de casa, es atacada por un desconocido en una estación de autobuses. Daniel llega en el último momento para salvarla y la lleva de vuelta a casa. Es entonces cuando Natalia decide meterla en la televisión como becaria para poder tenerla más controlada. Isabel no perderá la oportunidad de hundir y humillar a la hija de su rival.
Mientras tanto, Virginia y Natalia fingen un accidente para obligar al confidente anónimo a que les entregue las imágenes del verdadero asesino de Mara entrando en el despacho de Arturo. La treta surge efecto y el confidente envía a Natalia el vídeo. Analizándolo detenidamente, descubren la única pista que les puede llevar al asesino: éste lleva en su pulsera un reloj Náutica de dos esferas. Natalia ve un día ese reloj en los laboratorios sin saber quién es su dueño... Para obligar a éste a salir a la luz, Natalia utiliza como cebo las imágenes de la cámara de seguridad, la única prueba existente de que Arturo es inocente.
Pero el asesino es demasiado listo y se les adelanta: consigue arrebatarles el vídeo sin darse a conocer.
A Natalia todavía le queda otra incógnita que resolver: ¿por qué iba Fernando a ver a Arturo a la cárcel? Fernando le da la respuesta una noche en que la invita a cenar: le entrega una carta escrita del puño y letra de Arturo. En ella, le dice a Natalia que si él muere, deberá confiar en Fernando, que él cuidará de ella. Natalia, emocionada, se levanta de la mesa.
Es entonces cuando Fernando mira la hora en un reloj que saca de su bolsillo. Un Náutica de dos esferas. El reloj del asesino.