En la cuarta temporada la historia transcurre en las montañas de Carolina del Norte, único refugio en el que pueden mantenerse seguros aquellos que llegan desde tierras escocesas a las colonias americanas de Inglaterra. Claire y Jamie tratarán de empezar una nueva vida en este nuevo territorio donde les recibe Jocasta (Maria Doyle Kennedy), tía de Jamie y dueña de una plantación. Las tierras se encuentran alteradas por los continuos conflictos entre los colonos y las tribus nativas. Además, el hambre no hará más que acrecentar las tensiones. En esta nueva temporada hace su aparición también Stephen Bonnet (Ed Speleers) como un contrabandista que tiene cuantas pendientes con los Fraser y que tratará de complicarles la situación a la pareja.
La situación con los nativos es cada vez más difícil, al mismo tiempo que Claire y Jamie intentan mantener la paz con ellos, otros terratenientes no opinarán lo mismo. El joven Ian si consigue entablar muy buena relación con ellos y vive por temporadas como nativo para aprender más de sus costumbres. Acabará viviendo con los Mohawk, la tribu más importante.
En el siglo XX, Brianna (Sophie Skelton) busca, con la ayuda de Roger (Richard Rankin), evidencias de que sus padres llegaron a reunirse en el siglo XVIII. Finalmente Brianna descubre una noticia muy importante que debe comunicarle a sus padres e intenta viajar en el tiempo para poder encontrarlos. Roger, a pesar del deseo contrario de ella, la seguirá hasta Carolina del Norte, donde no correrá la mejor de sus suertes.